No existe el mal tiempo, solo la ropa inapro-piada”. La estilista y consultora de moda Marina Gallo, afincada en París, donde diseña las joyas de su firma Ophiuchus, resume así su experiencia con el tiempo y la lluvia en Escocia, un país que conoce bastante bien y al que acaba de viajar de nuevo con su marido. Esta vez la ruta elegida fue Glasgow y de ahí condujeron en coche hacia el suroeste. “El camino te lleva a través de un paisaje maravilloso donde puedes ver las islas de Gigha, Cara, Jura e Islay. También esuvimos alojados en una propiedad privada cercana a Campbeltown”, relata Marina sobre su ruta viajera.
“¿Mis imprescindibles? Cámara de fotos, botas de agua, abrigo impermeable, jersey de cashmere y gorro de lluvia”
“Escocia es uno de mis sitios favoritos, ya habíamos estado aquí varias veces antes. Esta última escapada ha sido por trabajo, así que me he sentido muy afortunada de poder compartirla con mi marido [el fotógrafo Luis Ridao]”, cuenta. La imagen que recordará Marina para siempre de este viaje es una puesta de sol mágica que la naturaleza le regaló cerca de donde se alojaron. “Estuvimos con unos amigos, que tienen una casa maravillosa. Un lugar increíble, superchic pero effortless, como sus dueños”.
¿Y qué no debe faltar en nuestra maleta si tenemos pensado hacer una ruta escocesa? Marina lo tiene claro: “Cámara de fotos, botas de agua, abrigo impermeable, jersey de cashmere, medias, gorro de lluvia y mocasines o algo liviano para cuando estás dentro del hotel, porque están muy bien calefaccionados”. ¡Feliz viaje!
Qué ver y qué hacer
- The Hill House: “Edificio histórico representativo del art nouveau en Glasgow, firmado por Margaret y Charles Rennie Mackintoshy declarado de interés nacional”.
- Cameron House: “Ubicado en la orilla del lago Lochmond, este hotel es uno de los tesoros nacionales de Escocia”.
- Loch fyne oyster bar: “Las mejores ostras y mariscodel país se encuentran en este pequeño restaurante de Cairndow, a una hora de Glasgow. Una parada ideal si vas por carretera. De camino está el pueblo pesquero de Tarbert, donde también se pueden verlas ruinas de su castillo, y hay algunos cafecitos, restaurantes y tiendas”.