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living45 vanessa losada© Cortesía de Vanessa Losada

Escuela de salud

Vanessa Losada: cocina para sanar

Licenciada en Bellas Artes y naturópata, sus proyectos ahondan en la relación entre la alimentación ecológica saludable, la biococina y la salud física y emocional. Su método integra la creatividad como herramienta para transformar los hábitos de alimentación poco saludables


31 de agosto de 2023 - 15:01 CEST

Fue el arte lo que, a Vanessa Losada, la condujo al mundo de la alimentación saludable y consciente. “Trabajaba como artista y estaba investigando en diversos campos: en lo social, lo medioambiental y sobre las mujeres. Entonces llegué a la cocina y terminé haciendo naturopatía, dietoterapia y fitoterapia”, cuenta. Así se convirtió en la fundadora del aula de biococina El sentido del gusto, donde imparte un máster de cocina saludable. Su actividad como experta gastronómica se centra en la formación, la asesoría, el food coaching y las consultas de naturopatía en  Tacha Beauty .

“Ahondo en la relación entre la alimentación ecológica saludable, la biococina y la salud. Mi metodología integra la creatividad como herramienta de desarrollo personal capaz de transformar, desde lo profundo, nuestras creencias y hábitos de alimentación poco saludables”, explica. Para ella, la alimentación es un material plástico que puede hablar de muchísimas cosas. “En el arte, cuando se elige un material, se busca cuestionar estructuras y crear un collage a partir de diferentes ingredientes. Así que, si decides comprar un alimento concreto, uno local y ecológico, por ejemplo, ya estás contando una historia. Cuando haces la receta y mezclas ingredientes diferentes, sale una nueva historia que va a impactar de distintas maneras. No solamente en la salud y en el cuerpo de una persona, sino también en sus emociones, a nivel medioambiental, de sostenibilidad, a nivel social y económico. Generas un nuevo paradigma”, continúa.

LIVING45 VANESSA LOSADA© Cortesía de Vanessa Losada

Para Vanessa no es lo mismo hacer una comida con cariño y con atención plena desde el   mindful eating   que hacer algo rápido tipo fast food. La impronta es diferente. “La alimentación holística tiene la capacidad para entender elementos que se consideran dispares: la relación entre la alimentación y el cuerpo, por ejemplo. Es también un material artístico con el que se puede hablar de muchísimas cosas”, añade. Ella empezó hace dos décadas a trabajar con la cocina hipotóxica y limpia e imparte su máster desde hace 14 años. “En realidad la palabra biococina surge no solo como una tendencia ecológica y saludable, sino que va más allá. En mis formaciones hay una parte culinaria pero también otra de desarrollo personal. La alimentación consciente te lleva a mirarte, a tus luces y a tus sombras y a partir de ella podemos construir muchas cosas a nivel mental, físico y social”.

Integrar es la clave. Cuando la alimentación saludable forma parte de nuestra vida y llegamos a entender el impacto que tiene en nuestra salud, hacemos el gran cambio. Y para eso hace falta algo fundamental: tiempo. Por eso, cuenta Vanessa, su máster de biococina dura nueve meses. “He empezado a desarrollar retiros de alimentación emocional. A veces, no conseguimos cambiar nuestra alimentación porque detrás hay improntas que tienen que ver con nuestra familia, con la ansiedad, con el vacío... Eso es lo que impide que cambies. Y se puede trabajar”, concluye la experta.

Mis favoritos en la cocina

  • Tres cosas que no deberían faltar nunca en la despensa: “Fermentados, verduras ecológicas y aceites y grasas saludables (aceite de lino, de coco y de oliva ecológico)”.
  • El mejor consejo en la cocina: “Convierte la cocina en un ritual de autocuidado para darle valor al producto y a la alimentación”.
  • Una manía o costumbre a los fogones: “Al cocinar me gusta que haya orden”.
  • Herramienta o gadget de cocina predilecto: “Un menaje libre de tóxicos. Sin teflón ni nada que pueda alterar la calidad de los alimentos, especialmente cuando están al fuego. Utilizo mucho también un mortero japonés que se llama suribachi y sirve para poner semillas”.
  • Último descubrimiento: “Un aceite que se está empezando a comercializar ahora y que tiene muchas propiedades; se llama aceite de sacha inchi”.

Cuscús de coliflor

LIVING45 VANESSA LOSADA© Cortesía de Vanessa Losada

Ingredientes (para 2 personas)

● 350 g de coliflor rallada ● ½ cucharada pequeña de canela molida ● ½ c. p. de comino molido ● 3 cucharadas soperas de aceite de oliva ● 3 c. s. de semillas de cáñamo ● 4 c. s. de eneldo fresco picado ● 3 c. s. de zumo de limón ● 1 c. s. de ralladura de limón ● 1 c. s. de ralladura de limón de ● 2 c. s. de grosella negra ● 2 c. s. de coco seco laminado

Elaboración

  1. En una sartén, salteamos ligeramente la coliflor previamente rallada en forma de cuscús con una cucharada sopera (unos 10 gramos) de aceite, la canela y el comino.
  2. En un bol, echamos las semillas de cáñamo, eneldo, la ralladura de limón y la coliflor salteada.
  3. Aliñamos con el resto del aceite, zumo de limón y sal y mezclamos ligeramente.
  4. Servimos y decoramos con el coco y la grosella negra.

Mi menú diario

  • Desayuno: “Si no ayuno hasta las 13:00 h (durante el ayuno tomo una infusión de canela, jengibre y un chorro de vinagre de manzana), suelo desayunar un pudding de chía con leche de coco, frutos rojos y semillas y una infusión de especias”
  • Media mañana: Zumo o batido verde
  • Comida: Arroz de coliflor salteado con tempe y setas shiitake con hierbas aromáticas frescas, yogur de almendras y pistachos
  • Merienda: Matcha latte con leche de almendras
  • Cena: Sopa de miso con jengibre y algas wakame y un bol de kale salteada y calabaza asada con germinados, quinoa roja, huevo ecológico y aceite de lino