Con solo 13 años, grabó la película El Dorado de la mano de Carlos Saura y su magnética cara enamoró a todos los que la vieron. Desde entonces, el mundo de la moda se fijó en ella y se convirtió en una de las modelos más conocidas y contratadas, dentro y fuera de nuestras fronteras. Hace más de tres décadas se trasladó a vivir a París y allí ha estado más de media vida, en un casa con vistas a la Torre Eiffel, aunque todos los veranos venía a España para disfrutar de sus vacaciones. Unas vacaciones en Sotogrande (Cádiz), un rinconcito del sur de España donde el mar se mezcla con las palmeras, el golf se respira en el ambiente y el contacto con la naturaleza y los planes al aire libre forman parte de la vida diaria. En definitiva, aquí es donde Inés es feliz. También su hijo Diego que, desde que nació, viene a pasar aquí los veranos junto a su madre.
-Inés, ¿qué significa este lugar para ti?
-Sotogrande es como un jardín secreto lleno de maravillas por descubrir.
-¿Recuerdas cuándo fue la primera vez que viniste?
-Oí hablar de este lugar muchas veces e incluso vine en ocasiones de índole personal importantes. ¡Me pareció precioso! Recuerdo con especial cariño San Roque Club, al cual por aquella época estaba muy ligado Severiano Ballesteros. Tengo unos recuerdos maravillosos de aquella época.
“Sotogrande, para mí, es como un jardín secreto lleno de maravillas por descubrir. Me intento escapar siempre que puedo. El mes de enero es particularmente encantador. Sotogrande no es solo el mes de agosto”
-¿Sueles venir mucho, o solo en la temporada de verano?
-Me intento escapar siempre que puedo. Me gustaría poder venir mucho más, pero al final el día a día siempre nos complica. El mes de enero es particularmente encantador. Sotogrande no es solo el mes de agosto.
-¿Cómo es tu casa de aquí? ¿Qué es lo que más te gusta de ella?
-En Madrid vivo en un piso y me encanta. Pero aquí tengo jardín y, ya solo el hecho de poder tener espacios más amplios, me ayuda, según entro por la puerta, a desconectar de todo. Disfruto de mi anonimato.
-¿Cómo es un día perfecto de vacaciones en la vida de Inés Sastre?
-Levantarme sin miedo e ir ilusionada a jugar mi campeonato de golf y… ¡ganarlo! Eso sería mi día perfecto. Aunque la realidad no sea así y a veces pierdo… (risas). Aquí estoy en un sitio precioso, rodeada de amigos y de gente que me quiere y con la que me siento muy cómoda y arropada, con lo cual cualquier día es maravilloso.
“El golf sólo me da alegrías, además de ayudarme a mantenerme en forma. Y aunque la gente no lo crea, es más duro de lo que parece. Pasar tantas horas pensando en una pelotita, mirando al verde y concentrarte, es una actitud”
-¿Por qué elegiste este lugar como tu sitio para veranear?
-En realidad fue un poco raro… Llevaba ya muchos años viviendo en París y es como si los franceses me indicasen que era importante que me volviera a arraigar en España. Y, de repente, surgió esta oportunidad. Fue una especie de premonición y es verdad que, en aquella época, necesitaba de algún modo retomar mis raíces y hacer como un nido, para que mi hijo se sintiese español; así que me animé. Ser amante del golf me dio un empujón también.
-Sabemos que el golf es tu pasión. ¿Desde cuándo lo practicas?
-Desde muy pequeña; y eso ayuda mucho. Nunca se puede rechazar una partida de golf, como dicen algunos amigos míos, porque el golf siempre te hace bien, aunque juegues mal. Es una gran lección de humildad.
“No me encontraréis a menudo tomando el sol en la playa. Pero, sin embargo, me encanta pasear por la orilla del mar y procuro dar largos paseos todos los días”
-¿Qué tiene este deporte que todo el que juega se engancha?
-Para mí el golf es algo natural, puesto que empecé a jugar de muy niña, pero nunca debemos olvidar que lo importante es disfrutar.
-Y a ti, ¿qué te aporta el golf en tu vida?
-El golf solo me da alegrías, además de ayudarme a mantenerme en forma. Y aunque la gente no lo crea, es más duro de lo que parece. Pasar tantas horas pensando en una pelotita, mirando al verde y concentrarte, es una actitud.
“Aquí estoy en un sitio precioso, rodeada de amigos y de gente que me quiere y con la que me siento muy cómoda y arropada, con lo cual cualquier día es maravilloso”
-Otro de los clásicos del verano es la playa. ¿Eres de las que pasa largas jornadas en la arena?
-Pues va a ser que no, raramente me encontraréis tomando el sol en la playa, más bien la huyo. Pero, sin embargo, me encanta pasear por la orilla del mar y procuro dar largos paseos todos los días.
-¿Cuál es tu look ideal para ir a la playa?
-Un precioso bañador de Eres y un pareo.
“Llevaba ya muchos años viviendo en París. Necesitaba un lugar donde hacer nido para que mi hijo se sintiera español”
-Y, por último, ¿qué recuerdos tienes de tus vacaciones de la infancia?
-Mis recuerdos de infancia son felices y así he querido que lo fueran para mi hijo, a pesar de haber vivido tantos años en el extranjero. Traje a Diego a Sotogrande para que se sintiese español y para que se divierta como yo me divertí cuando era pequeña.
El Sotogrande de Inés Sastre
- El mar: A Inés la podrás ver en el Club de Playa El Octógono, un lugar con acceso a la playa donde la modelo aprovecha para darse un baño, descansar en las tumbonas y tomar el aperitivo junto a sus amigos.
- Deportes: El golf es el deporte por excelencia de Inés y Sotogrande el paraíso de los golfistas. Ella juega normalmente en el Real Club de Golf de Sotogrande, su club. Pero hay días en los que la podemos ver en otros campos de la zona, como Valderrama, La Reserva o la Alcaidesa.
- Restaurantes: Trocadero, con una espectacular decoración y encima del mar; Midas, en el puerto deportivo, o el chiringuito Gigi´s Beach son tres de los place to be de la urbanización gaditana.
Al aire libre
Inspirados en el estilo de vida estival de la modelo vallisoletana, elegimos las prendas y piezas de decoración que darán vida a tu verano.