Lo sostenible siempre ha estado en la base de Suuky Porto, una marca textil portuguesa que ha puesto en valor la tradición local, dando una nueva vida a una antigua fábrica familiar de ropa de hogar. Detrás de todo ello se encuentran João Falley y su marido Andreas, que son además padres de cuatro hijos: Lourenço, Mathilde, y los gemelos Theresa y Gonçalo. La marca, de hecho, nació cuando llegaron los gemelos, pues João, abogada por aquel entonces y su marido, que procedía de una familiar largamente ligada a la producción textil en Oporto, no encontraban ropa de cama que les gustase para sus hijos. Comenzaron entonces a diseñarla ellos mismos, y desde entonces su colección no ha dejado de crecer y hoy no solo producen ropa de hogar, si no prendas para toda la familia con el denominador común del uso de fibras naturales de altísima calidad, una producción sostenible y un diseño pensado para durar en el tiempo.
- Tu marido es la tercera generación de la familia en el universo textil, ¿verdad?
- Si. Andreas, al igual que sus padres antes que él, ha trabajado en el sector textil durante toda su vida profesional, aportando una gran experiencia a Suuky. Todos nuestros productos se fabrican en una fábrica textil que pertenece a nuestra familia y que también produce para otras muchas marcas internacionales. Queríamos ofrecer piezas duraderas y atemporales que puedan ser utilizadas por varias generaciones.
- Vuestra producción es sostenible, ¿qué medidas habéis tomado en esta línea?
- Al utilizar nuestras propias instalaciones de producción, solo producimos según los pedidos realizados, sin excedente. Nuestra creencia en la verdadera sostenibilidad es evitar la sobreproducción, reduciendo así drásticamente el desperdicio de recursos. Además, al producir todas las prendas en nuestras propias instalaciones, reducimos la contaminación y las emisiones al evitar el transporte y el almacenamiento innecesarios en diferentes lugares y países. Nuestra fábrica es autosuficiente en energía verde al 100%, con paneles solares que cubren los tejados de 4000 m², y cuenta con certificaciones clave en sostenibilidad, como OKOTEX, GOTS y GRS, entre otras.
- ¿Cómo refleja vuestro universo vuestra propia ciudad, Oporto?
- La ciudad de Oporto es una fuente inagotable de inspiración para nosotros. Una mezcla arquitectónica ingeniosa entre la antigua ciudad, con su encanto de antaño, y las construcciones modernas vanguardistas. Oporto es un paraíso que estimula constantemente los sentidos: antiguas calles empedradas; pequeñas casas de colores; los deliciosos aromas de la cocina local; la brisa marina de la playa; la actitud tranquila de la gente del sur...
- ¿Cómo es vuestra casa? ¿la decorasteis vosotros mismos?
- Creo que nuestro hogar tiene el estilo atemporal de una familia que valora la elegancia clásica en su decoración con un toque de modernidad. Hemos pensado y decorado la casa nosotros mismos. Cada detalle y elemento decorativo ha sido comprado con cariño, o heredado, combinando lo tradicional con lo contemporáneo. Queríamos un ambiente cálido y acogedor que celebrara la vida en familia y creara recuerdos duraderos.
- ¿Cuáles son las piezas más especiales que tenéis en ella?
- Nos gusta adornar nuestras casas con piezas de artistas portuguesas que nos gustan y que además son amigas. Tenemos alguna obra de la pintora Graça Paz, y como nos encanta preparar mesas muy decorativas, tenemos muchas cerámicas de Anna Westerlund, Teresa Branco e Iva Viana.