Leticia Riva, María Mesonero-Romanos y María Gil viven montadas en un caballo desde que tienen uso de razón y, a día de hoy, compiten en todos los concursos ecuestres que hay en España y en otros tantos fuera de nuestras fronteras. Un mundo en el que se codean con multitud de caras conocidas (desde Carlota Casiraghi hasta Marta Ortega, pasando por Athina Onassis o Luis Martínez de Irujo, entre otros) y donde el glamour y el buen gusto brillan por sí solos.
Por eso estas tres amigas, y ahora socias, han creado Marion Equestrian, una marca de camisas para montar a caballo inspiradas en las amazonas de antes. Para hablar de esta pasión compartida viajamos hasta Aranjuez, donde se reúnen en un enclave único: la finca perteneciente a la familia de Leticia, la cual posee una yeguada clásica. Allí, las tres comparten grandes momentos, vestidas de jinetes o en pijama. A veces, todavía encuentran tiempo para cocinar, jugar al billar u otros pasatiempos a los que se presta la casa, tan estimulante como encantadora.
-Os conocéis del mundo de la hípica, ¿desde cuándo los caballos forman parte de vuestra vida?
-Leticia Riva: En mi caso, desde pequeña, porque mi padre ha competido a alto nivel desde que era joven. Una pasión que nos ha inculcado a mis hermanos y a mí.
-María Gil: Yo me he criado encima de un caballo junto a mi padre, que, además de veterinario, tiene una yeguada de pura raza española. Sin embargo, no empecé a competir hasta hace seis años, cuando realmente comenzó mi carrera deportiva.
“Los caballos forman parte de mi vida desde que era pequeña, porque mi padre ha competido desde joven y nos inculcó esta pasión a mis hermanos y a mí” Leticia Riva
-¿Cómo es la vida de una jinete profesional?
-L.R.: Monto de tres a cuatro horas diarias, además del entrenamiento físico personal que requiere la alta competición. Viajamos mucho, pero, por suerte, tenemos en España algunos de los mejores concursos a nivel nacional e internacional, haciendo más fácil compaginar mi vida deportiva, personal y laboral.
-¿Qué es lo que más os gusta de ser amazonas?
-M.G.: Sin duda, poder trabajar al aire libre, mano a mano con los caballos. Conocer cada vez más a tu caballo y descubrir lo sensibles e inteligentes que son. Los viajes también son algo muy destacado de este deporte, te permite conocer lugares, certámenes y personas.
“Lo que más me gusta de esta profesión es trabajar al aire libre junto a los caballos, y descubrir lo sensibles e inteligentes que son” María Gil
-¿Cómo es vuestra relación con los caballos?
-L.R.: Muy cercana. Cuando me subo a un caballo, lo paseo, lo salto, lo galopo, o sea, lo trabajo a nivel físico y deportivo como hago conmigo misma, porque en esta disciplina ambos somos atletas. Y lo cuido como me cuido a mí, controlando su alimentación, su descanso, su entrenamiento… Los dos trabajamos para tener la mejor trayectoria deportiva posible. Y cuando lo jubilamos, me encanta verlo suelto en el campo, porque el agradecimiento que siento es inmenso. Con todo lo que hemos pasado juntos, la conexión es ya para siempre.
“Este lugar siempre me ha parecido un paraíso, de pequeñas veníamos casi todos los fines de semana y me recuerda mucho a mi infancia” María Mesonero-Romanos
-Entre torneo y torneo, nace Marion Equestrian. ¿Cómo surgió el proyecto?
-María Mesonero-Romanos: Leticia y yo llevábamos muchos años hablando de que queríamos sacar algo relacionado con el universo ecuestre, pero no llegamos a la idea de Marion hasta que volví a montar y tuve que comprarme la ropa y la equipación desde cero. Ahí nos dimos cuenta de que un producto tan “simple” como una camisa clásica se había dejado de hacer. Así que decidimos lanzar la marca y homenajear a las amazonas de antaño.
Esta casa se remonta a principios del siglo XIX. Recuerda a los cortijos y, actualmente, la parte más antigua es la que se utiliza como vivienda” Leticia Riva
-¿Qué destacaríais de vuestras camisas?
-M.M-R.: Su calidad; somos la única marca española de moda lenta en materia de hípica. Le damos mucha importancia a la procedencia de las telas y a la fabricación de las camisas (cien por cien a mano y artesanales). Intentamos que mantengan un toque actual, pero a la vez que sean clásicas y elegantes. Consideramos que son muy polivalentes, vemos que están gustando mucho para monterías, looks de campo o con un vaquero para ir por la ciudad.
-Nos recibís en la finca de Leticia. ¿Qué os inspira este lugar?
-M.M-R.: La definiría como una casa de cuento. Este lugar siempre me ha parecido un paraíso. De pequeñas, veníamos casi todos los fines de semana y me recuerda mucho a mi infancia. Hemos hecho aquí algún shooting de Marion y ha quedado espectacular.
“Cuido al caballo como me cuido a mí misma. Ambos entrenamos para tener la mejor trayectoria deportiva posible” Leticia Riva
-¿Qué historia hay detrás de esta residencia?
-L.R.: La casa se remonta a principios del siglo XIX. Su origen responde a la agricultura, por la fertilidad del terreno y por su proximidad al río Tajo.
La forma de las edificaciones recuerda a los cortijos y, actualmente, la parte más antigua es lo que se utiliza como vivienda. Y la yeguada y las cuadras quedan muy próximas, algo que busca la cercanía y la familiaridad con los caballos.
-¿Cómo fue el proceso de recuperación y decoración de la vivienda?
-L.R.: En un principio, la idea era que las cuadras estuvieran dentro de la construcción antigua, pero cuando mi madre se inspiró en el patio y en sus paredes históricas prefirió ubicar la casa dentro de la misma. A partir de ahí, dio rienda suelta a su creatividad y, después de varios años, llegó a terminar lo que, actualmente, es la casa y el patio. Eso sí, sin variar ni modificar los elementos arquitectónicos originales, como las paredes y las puertas, que es lo que aporta tanto encanto.
-¿Qué es lo que más te gusta de la propiedad?
-L.R.: La integración de los caballos y del campo con la casa original y, al mismo tiempo, los ambientes diferenciados creados por mi familia.
“Nos dimos cuenta de que un producto tan simple como una camisa clásica se había dejado de hacer. Por ello, decidimos lanzar nuestra marca y homenajear a las amazonas de antaño” María Mesonero-Romanos
-¿Qué planes soléis hacer estando aquí?
-Los planes están marcados por los caballos. Cría, entrenamiento y descanso entre competiciones. Una de las bondades de la finca es que, aun sintiéndote en el campo, estás muy cerca del casco urbano; nos gusta ir en bici o en coche, pasando por el precioso Jardín del Príncipe. Y Aranjuez, además, tiene una gastronomía fantástica.