El buen gusto es algo que Belén García Corsini heredó de su madre, gran anfitriona y apasionada de la decoración. Con ella, de pequeña, se recorrió mil y un anticuarios y ferias de arte y de todo ello quedó un poso que hace ahora dos años la llevó a emprender una nueva aventura profesional: una tienda, Monkey Home, en la que ha ido reuniendo las piezas de artesanía más especiales que encontró, tales como vajillas pintadas a mano, jarrones de vidrio soplado a la manera tradicional, mantas tejidas en telares de los de antes... Un sinfín de objetos únicos que ella ha combinado con piezas modernas en su hogar, a las afueras de Madrid, donde hoy nos recibe junto a sus dos hijas mayores, Claudia y Victoria, las cuales han heredado su pasión y la ayudan cada vez con más asiduidad a encontrar artesanos y piezas con alma para su tienda.
-Háblanos de esta casa...
-Pues mi marido y yo la construimos de cero en un terreno que adquirió mi madre hace años. Decidió hacer una promoción de cuatro casas y al encargarnos de la obra mi madre y yo, nos gustó tanto el lugar que decidimos vender la que teníamos en el centro de Madrid y venirnos aquí, rodeados de árboles y naturaleza.
“Cuando vimos este lugar, a mi marido y a mí nos gustó tanto que decidimos vender la casa que teníamos en el centro de Madrid y venirnos aquí, rodeados de árboles”
-Y ahora, ¿qué es lo que más te gusta de la casa?
-La sensación que tienes de estar en el campo, por los árboles que tenemos alrededor. También tiene muy buena orientación y mucha luz, que para mí es fundamental. Me encanta el cuarto de estar revestido en madera de roble, que lo hace muy acogedor. Lo utilizamos mucho para estar todos en familia, leyendo, viendo la tele...
“Me encanta el cuarto de estar revestido en madera de roble. Lo utilizamos mucho para estar en familia”
-¿La decoraste tú misma?
-No, la decoró la arquitecta de interiores Lucía Gómez- Acebo, a quien admiro mucho por su profesionalidad y su sentido de la estética. Ella me había hecho la reforma de mi casa anterior y en este proyecto quise que participara desde el primer momento, junto con el arquitecto Carlos de Ochoa y el paisajista Javier Mariategui.
“Uno de los tesoros de mi casa son las vajillas de El Puente del Arzobispo, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”
-¿Qué ‘tesoros’ hay en la casa?
-Sin duda los vasos de Gordiola, vidrio soplado artesanalmente desde 1719 y declarados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Los tenía por herencia y ahora tengo el privilegio de venderlos también en Monkey Home. Y las vajillas de El Puente del Arzobispo, también Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. En cuanto a los muebles, un banco Gustaviano del siglo XVIII y dos butacas del siglo XVIII que adquirí en el anticuario de César Gusano.
“Esta casa la decoró la arquitecta de interiores Lucía Gómez-Acebo, a quien admiro por su profesionalidad y sentido de la estética”
-¿Cómo la adaptaste a la vida con tres adolescentes?
-Para mis hijos esta casa es muy cómoda por el espacio que tiene. Nos encanta que siempre esté llena de amigos y que organicen sus comidas y cenas. Tenía un cuarto que iba a estar destinado a ellos y a sus amigos, pero al final decidí montar ahí el estudio de Monkey Home. ¡Creo que no me lo perdonan!
“Recuerdo que solía destrozar todas las revistas de decoración que veía por casa arrancando las páginas de lo que más me interesaba y coleccionándolas en carpeta”
-¿Recuerdas cuándo empezó a interesarte la decoración?
-Desde pequeña, mi madre solía llevarnos de viaje a visitar anticuarios, exposiciones de arte, ferias y museos. Me encantaba descubrir telas nuevas, objetos artesanales originales y antigüedades; me volví una apasionada de este mundo gracias a ella. Recuerdo que solía destrozar todas las revistas de decoración que veía por casa, arrancando páginas de lo que más me interesaba y coleccionándolas en carpetas que todavía conservo.
-¿Puede ser esa pasión la que ha hecho especial tu tienda?
-Puede ser. Es un espacio donde se puede apreciar el alma de cada uno de los artesanos y artistas que exponen sus piezas. Hay maravillas que corren el riesgo de perderse si no les damos la importancia que merecen y más aún si tenemos en cuenta que la siguiente generación no tiene la misma vocación artesanal que sus predecesores. En Monkey Home tenemos joyas como las piezas de esmalte cerámico de Fernando Alcalde, muebles de ratán, copas-joya de The Exvotos, vajillas pintadas, jarrones de cristal soplado o mantas tejidas a mano en telares tradicionales. Técnicas que si no protegemos, acabarán desapareciendo.
“Esta casa tenía un cuarto que iba a estar destinado a mis hijos, pero al final decidí montar ahí el estudio. ¡No me lo perdonan”
En 3 claves
- Todo en orden. “Para mí, una de las cosas más importantes es el orden y la simetría; necesito una casa ordenada para tener mi cabeza igual, es un poco TOC...”
- Casa en calma.“Utilizo tonos que me aporten serenidad: beis, blancos, tierra… Nunca mezclo más de tres o cuatro; necesito armonía cromática”
- El telón de fondo. “Me encantan las telas, siempre he querido diseñarlas y quizás sea mi próximo proyecto. Me gustan de lino o con texturas y siempre con fondo claro, que aporta luminosidad”
Calor de hogar
Es tiempo de disfrutar de los nuestros en torno al calor del hogar. Rodéate de suaves tejidos de invierno y pon el fuego a funcionar... ¡Hoy toca comida en familia!