Su nombre es Paola Freire, pero todos la conocen por Foodtropia, su gran aventura gastronómica. Estas son las claves culinarias que la han convertido en todo un referente.
-¿Cuál es el estilo de cocina que te define?
-Cocina tradicional con un toque moderno y producto de temporada, si puede ser ecológico, de proximidad y muy variado. Trato de poner en práctica técnicas sencillas que pongan en valor ese producto primando el sabor. También soy partidaria de tener tus momentos de festejo, de salir a cenar con familia y amigos y comer platos que quizás no son tan sanos, pero que son ricos y que nos hacen felices. Lo importante es buscar el equilibrio y que nuestro día a día sea lo más saludable posible, pero sin obsesionarnos.
-¿Cuándo y a qué se debió esta manera de redirigir tu dieta?
-Desde muy pequeña mi madre nos ha transmitido, a mis hermanas y a mí, las bases de una alimentación saludable. Es algo con lo que estoy muy concienciada desde que tengo uso de razón, por eso creo que nunca he sentido la necesidad de hacer una dieta, sino de alimentarme bien. Ahora que soy madre trato de hacer lo mismo con mi hijo. Es un gran comedor y, aunque se necesita mucha paciencia, ha sido un reto ir enseñándole qué y cómo comerlo. Da gusto verle disfrutar con la comida. Ojalá mi segunda hija siga sus pasos.
Mis favoritos en la cocina
- Tres cosas que no deberían faltar nunca en la despensa: Huevos, salsa de tomate y, por supuesto, aceite de oliva virgen extra.
- El mejor consejo en la cocina: No tener miedo y ser organizado.
- Una manía o costumbre a los fogones: La limpieza y el orden.
- Herramienta de cocina predilecta: Mis cuchillos y tablas.
- Último descubrimiento: Anacardos tostados con chutney de mango que compro en la tienda El Comandante en La Coruña. Mi última obsesión.
-¿Cómo te ha acompañado tu cuenta de Foodtropia en esta aventura gastronómica?
-Ha sido y es un pilar fundamental; lo que me impulsó a emprender en este sector y a inscribirme en Le Cordon Bleu. Me permitió darme cuenta de que, aquello que pensaba que era un simple hobby, podía ser algo más.
-¿Qué alimentos conforman tu modelo nutricional?
-Frutas y verduras de temporada acompañadas de proteínas animales como la carne y el pescado. No faltan cereales de todo tipo (muchas veces integrales), huevos, legumbres y, en menor medida, lácteos. Me encanta tener una despensa repleta de conservas de calidad; es mi recurso para cuando no tengo tanto tiempo.
-¿Cuál es el estilo de vida que completa este modelo?
-Me gusta mantenerme activa, practico yoga y golf y paseo mucho. En mi profesión cada día es diferente, pero trato de mantener, en la medida de lo posible, unas rutinas que me den paz . A pesar de no tener horarios, intento reservar momentos del fin de semana para mí y para mí familia; es fundamental recargar pilas, descansar, desconectar y así afrontar cada semana con ganas.
-¿En qué te ha beneficiado alimentarte de esa manera?
-Te sientes bien contigo misma, duermes mejor y tienes fuerza y energía para seguir el ritmo de la semana. La comida es un momento de unión, de compartir y de acercarte a la gente.
Crema de lenteja roja con zanahoria, calabaza y curri
Ingredintes
- 1 puerro
- 1/2 cebolla
- 3 zanahorias
- 1/2 calabaza pequeña
- 2 puñados de lentejas rojas
- curri en polvo
- jengibre (opcional)
Elaboración
En una cazuela con aceite de oliva virgen extra pochamos la cebolla y el puerro con un poco de sal y pimienta. Añadimos la zanahoria cortada en rodajas, la calabaza cortada en cubos no muy grandes, las lentejas, una cucharadita de curri en polvo y el jengibre rallado o en polvo y cubrimos generosamente con agua o caldo de verduras. Cocemos a fuego medio 15 min o el tiempo que sea necesario hasta que la zanahoria y la calabaza empiecen a estar tiernas y las lentejas cocidas. Trituramos 2 minutos a máxima potencia, rectificamos de caldo para lograr una textura cremosa, probamos y rectificamos de lo que sea necesario.
“Desde muy pequeña mi madre nos ha transmitido, a mis hermanas y a mí, las bases de una alimentación saludable. Es algo con lo que estoy concienciada desde que tengo uso de razón”
Pechugas de pollo en escabeche acompañadas de cuscús con arándanos, pistachos y hierbabuena
Ingredientes
- 2 pechugas de pollo
- 3 zanahorias pequeñas
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 2 hojas de laurel
- 150 ml de aceite de oliva
- 50 ml de vinagre de vino blanco o jerez
- 50 ml de vino blanco
- 50 ml de agua
- 1 cucharada de pimienta en grano
- sal
- piel de cítricos, alguna hierba aromática como tomillo o romero (opcional).
- Para el cuscús:
- 125 g de cuscús
- 125 ml de caldo de verduras o pollo
- 70 g de arándanos deshidratados
- 70 g de pistachos
- hierbabuena
- aceite de oliva virgen extra
- sal y pimienta
Elaboración
Cortamos la cebolla en tiras, la zanahoria en rodajas y machacamos los ajos con piel. Salpimentamos las pechugas. En una cazuela ponemos un poquito de aove y doramos las pechugas. Retiramos y reservamos. En esa misma cazuela, a fuego bajito, ponemos el aceite con las verduras y la pimienta y pochamos durante 2-3 minutos. Añadimos vino y vinagre y esperamos un par de minutos a que se evapore el alcohol para poner el agua y la sal. Incorporamos las pechugas y añadimos el laurel, las hierbas y las pieles de cítricos. Cocinamos con la tapa a fuego medio bajo (hervor suave) durante 35 minutos o hasta que estén tiernas y se deshagan al pincharlas con un tenedor. Nota: los escabeches están más sabrosos pasadas 24-48 horas. Para el cuscús: ponemos el caldo en un cazo y cuando empiece a hervir añadimos el cuscús. Tapamos, apagamos el fuego y dejamos que el cuscús absorba todo el caldo. Añadimos un hilo de aove y removemos para que no se apelmace. En una ensaladera mezclamos el cuscús con los arándanos, los pistachos y la hierbabuena picados y un poco de aove y sal. Servimos las pechugas con el cuscús.
Mi menú diario
Desayuno
“Me encanta variar y hacerlo completo. Suelo tomar yogur (alterno de coco y vaca) con fruta de temporada y a veces algo de granola. En invierno me gusta hacer porridge para mí y para mi hijo que mezclo con fruta de temporada. También tomo una tostada con aceite de oliva virgen”.
Comida
“Soy muy de tomar un plato único completo, a veces también tomo una crema de verduras y algún plato de proteína con verdura. En invierno soy muy fan de los guisos y en verano, en cambio, disfruto más de tomar ensaladas bien fresquitas”.
Cena
“Platos ligeros, suelo improvisar. Me encanta el huevo en todas sus versiones; preparo tacos con restos de proteínas que sobran de la semana; a veces los sirvo sobre cogollos de lechuga... Mi marido suele decir: “Yo abro la nevera y no hay nada y tú en 5 minutos haces magia y preparas algo rico y sano’”.