Tras licenciarse en Ciencias Empresariales y formarse en las mejores escuelas de repostería, Rosalba Lantero abrió su obrador en 2015. Desde entonces se ha convertido en una pastelera de referencia, llegando a conducir el programa ¿Qué hay de postre? Su arlequín de chocolate con chantilly, su suspiro de limón y sus merenguitos son ya legendarios, y con ellos nos da la bienvenida a su hogar de Madrid. Entre brincos de su perro Zeta y una cocina en color rosa pastel, que haría las delicias de María Antonieta, nos habla de una vida consagrada al dulce y nos explica el paso a paso de tres recetas que lucen tan bien como saben.
“Mi pasión por la repostería viene desde niña. Soy muy golosa y en mi casa siempre se ha dado importancia al buen comer”
-¿Visitaste muchas casas antes de dar con esta o fue amor a primera vista?
-Uno de mis sueños siempre fue tener un perro, por lo que quería una casa que estuviera cerca de un parque como El Retiro para poder pasearlo. Así que lo de este piso fue un flechazo. Vivo aquí desde hace cuatro años y medio, de los cuales Zeta lleva conmigo cuatro.
-Aparte de la localización, ¿qué más te cautivó de ella?
-Que es de nueva construcción con una fachada neoclásica preciosa, inspirada en los viajes a México del arquitecto que diseñó el edificio: Manuel del Río, el mismo que construyó la residencia de los Reyes de España. Además, cuenta con un patio interior muy bonito.
-¿Cómo hiciste tuya la vivienda?
-Me la decoró Thomas Urquijo. Casi todos los muebles son suyos, aunque también tengo alguna pieza de la anticuaria Marie Christine Reiff. Como soy una enamorada de la pintura, tampoco faltan los cuadros.
-En materia de decoración, ¿cuáles son tus trucos clave?
-Invertir en calidad; prefiero tener menos, pero bueno. Me encanta el arte, la luz, los espacios abiertos, los tonos alegres, encuadernar mis libros de repostería y los hogares cálidos. Disfruto mucho de la casa y me gusta sentir que me acoge.
“Este piso fue un flechazo. Uno de mis sueños siempre fue tener un perro, por lo que quería estar cerca de un parque como EL Retiro para poder pasearlo”
-¿Cómo es tu día a día?
-Me levanto y voy a mi obrador, en Alcobendas. Allí produzco sobre todo para restaurantes, caterings y clientas particulares. Tengo web, pero no tienda física, así que este espacio está hecho con mucho mimo y rigor. Allí mi equipo y yo nos pasamos el día haciendo trufas, pastas de té, merenguitos, brownies, tartas de limón... hasta que regreso a última hora.
-¿Y qué haces cuando no estás ideando nuevas recetas?
-Me apasiona la pintura e ir de museos, montar a caballo, esquiar... ¡y voy a empezar a jugar al croquet! También me encanta recibir a mis amigos, organizar cenas y poner en escena la casa llenándola de flores. Aunque como buena entusiasta de los pasteles, siempre estoy probando recetas. Ahora me he metido en el mundo de los helados.
-¿De dónde viene tal pasión por la repostería?
-Ya desde niña. Soy muy golosa y en mi casa siempre se ha dado importancia al buen comer. Los domingos la familia se reunía para merendar y recuerdo estar constantemente metida en la cocina. Más adelante, cuando estudiaba en Suiza, los padres de una amiga disponían de casa en París e iba a visitarlos. Tendría entonces 12 años y, a través de ellos, conocí el mundo de la repostería francesa y fue creciendo mi admiración por esta profesión.
Arlequín de chocolate con chantilly (para 6 personas)
Ingredientes:
Para el arlequín: ● 470 g de chocolate● 390 g de mantequilla ● 100 g de azúcar ● 380 g de claras.
Para el glaseado de chocolate: ● 500 g de chocolate ● 190 g de agua ● 230 g de nata ● 50 g de glucosa líquida.
Elaboración:
Al baño María, fundimos el chocolate y la mantequilla necesarios para el arlequín. Aparte, vamos montando las claras en la batidora poco a poco y añadimos el azúcar sin dejar de remover. Una vez el chocolate y la mantequilla estén fundidos, combinamos ambas mezclas junto con el merengue en un recipiente desmontable y congelamos 24 horas. Por otro lado, para el glaseado, fundimos el chocolate con el agua y la nata y lo llevamos a ebullición; finalmente, sumamos la glucosa líquida fuera del fuego y removemos. Transcurridas las 24 horas de congelación, desmoldamos el arlequín y añadimos el glaseado por encima.
Merenguitos con virutas de oro (para 6 personas)
Ingredientes:
● 250 g de claras ● 425 g de azúcar ● papel de oro cortado en virutas.
Elaboración:
En un robot con varillas , montamos las claras y añadimos una primera cucharada sopera de azúcar. Dejamos que estas suban y vertemos la mitad del azúcar. Esperamos a que nuevamente se monten y añadimos el resto del azúcar poco a poco y sin dejar de remover. Batimos con las varillas durante unos veinte minutos para obtener el merengue. Encendemos el horno a 100 o 110 grados. En una manga pastelera, ponemos una boquilla ondulada e introducimos el merengue. Sobre una placa de horno con flexipan o papel sulfurizado crearemos nuestros merenguitos. Por último, los espolvoreamos con polvo de virutas de oro y los horneamos durante sesenta minutos.
Suspiro de limón merengado (para 6 personas)
Ingredientes:
● 400 g de helado de limón ● 200 g de claras ● 380 g de azúcar glas.
Elaboración:
En un bol, ponemos el helado de limón (también se puede hacer con helado de frambuesa o mango) y procedemos a montar las claras con el azúcar en un robot de varillas. Cuando estén montadas, añadimos un tercio del azúcar glas y trabajamos a velocidad media para que vayan cogiendo cuerpo. Una vez estén firmes, agregamos un segundo tercio de azúcar y seguimos trabajando con las varillas durante diez minutos. Repetimos la operación con el último tercio de azúcar. Ya con las claras bien montadas, las añadimos por encima al helado de limón con la ayuda de una espátula y las flambeamos para darles tono.