Entramos en casa de Marga Puigserver, donde nos recibe junto a su inseparable amiga desde los catorce años, Ana Nadal. Se trata de un paraíso situado en Sóller, un pueblo costero de la sierra de la Tramuntana flanqueado por montañas que se vuelven rosadas al atardecer. Un lugar de una belleza perfecta. Marga, una gran aficionada a la decoración, es comercial en Sotheby’s International Realty, así que gracias a su trabajo visita las casas y fincas más espectaculares de Mallorca. También conoce a fondo las tendencias nórdicas; vivió más de 15 años en Estocolmo y su paso por aquella ciudad se refleja en su casa. Nos cuenta que Suecia le marcó mucho a la hora de decorar, se enamoró de su estilo puro, sencillo y limpio, al que ella añade detalles étnicos. Madre de dos hijos de 17 y 18 años, el tatarabuelo de los chicos, el barón Hans von Blixen-Finecke, era hermano gemelo de Bror von Blixen-Finecke, que se casó con la escritora danesa Karen Blixen (Isak Dinesen) y viajó con ella a África para iniciar en Kenia una plantación de café. El resto es historia.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Esta aventura dio lugar a la novela Memorias de África, en la que se basó la película homónima protagonizada por Meryl Streep y Robert Redford. “En realidad, Karen estaba enamorada de Hans, pero él no quería vivir en África y se casó con Bror”, revela Marga. Ella reformó la casa y plantó el jardín “con sus propias manitas”. Quiso contratar a una paisajista a quien Sóller le pareció un lugar muy alejado, y Marga se lo tomó como un desafío. Ana, ceramista y nacida en Palma, comparte la misma elegancia natural que su hermana, Rosario Nadal, quien fuera imagen de Valentino y princesa de Preslav, aunque cuenta que muy pocas veces aluden a un posible parecido. “Rosario e Isabel, mi otra hermana, se parecen más entre ellas”. De manos de Ana salen verdaderas obras de arte. Elabora con mimo y delicadeza cada pieza de sus vajillas y se está convirtiendo en un icono del art craft. Ana y Marga nos reciben con una mesa decorada con peonías, un mantel de lino y las vajillas hechas a mano de la firma de Ana, Vimbi Vimbi.
-Ana, ¿cómo empezó tu afición por la cerámica?
-Tengo un taller de restauración junto a Natalia de Nicolás desde hace 20 años y ella se especializó en cerámica, por lo que siempre he estado en contacto con esta disciplina.
“Mi lugar favorito de la casa es, sin duda, la cocina. Es el centro de reunión de mi familia y mis amigos” Marga Puigserver
-Háblanos de tu proyecto Vimbi Vimbi.
-Vimbi Vimbi nace hace 8 años. Natalia y yo creamos una marca de diseño de vajillas. Empezamos pintándolas a mano y al poco tiempo nos pusimos a crearlas nosotras mismas. El nombre de Vimbi Vimbi sale de la mezcla de los nombres de nuestras dos perritas, Violeta y Bimba.
“En Suecia tenía un pequeño jardín y allí empezó todo. Ahora me quiero dedicar profesionalmente al paisajismo” Marga Puigserver
-Marga, ¿cómo es la vida en Mallorca?
-Es un privilegio. La calidad de vida en esta isla cosmopolita, con unos 300 días de sol al año y una geografía muy diversa con montañas altas y playas de agua cristalina, permite a los que vivimos en ella disfrutar de muchas horas al aire libre en parajes excepcionales. Entre semana el ritmo de trabajo es alto, pero lo vivimos con menos estrés porque lo tenemos todo a mano. Palma es una ciudad al lado del mar, muy bonita, con mucha vida. Yo soy de Sóller, un pueblo precioso y con mucho carácter y allí está mi alma, pero me gusta el pulso urbano y en invierno recorro gran parte de la isla con los amigos.
-Háblanos de tu jardín.
-En Suecia tenía un pequeño jardín y sin ser muy consciente de ello, es donde empezó todo. Cuando regresé a Mallorca y reformé mi casa quise hacer un jardín frondoso, muy verde, pero tenía claro que debía ser respetuosa con los códigos del entorno y ser sostenible, así que aposté por arbustos y especies que no necesitan grandes cantidades de agua y resisten bien las temperaturas. Coincidió en un momento de mi vida en el que tenía que sacar adelante muchas cosas, así que asumí otro reto más. Ahora no solo me encanta cuidar de mi jardín, sino que me gustaría dedicarme a ello. He abierto una cuenta en Instagram (@margavblixengarden) por si puedo ser fuente de inspiración.
-¿Cuál es tu rincón favorito de esta casa?
-¡La cocina sin duda! Es el centro de reunión de familia y amigos. ¡Me encanta tener gente en casa!