Son muchas...En especial, la familia y amig@s con los que comparto buenos momentos.
Hacer yoga, ir a misa, pasar el día en el campo o cerca de la naturaleza con la familia… Y por la tarde, lectura y cine. ¡Muy clásico!
Mi mat de yoga, mi calendario de consejos diarios, que son superinspiradores, y una vela de olor.
‘La vida es un carnaval’, de Celia Cruz.
No hago dietas...como de todo pero lo que me vuelve loca es el jamón ibérico 5J y las palmeras de chocolate.
Los encuentros familiares con mi querido abuelo en el palacio de Lebrija y los domingos en Nebline, la finca familiar de Sevilla.
India me abrió y cambió la mente y la vida en muchos sentidos.
Siempre trato de preguntarme: ¿a cuántas personas he hecho felices hoy? En mi opinión, no hay mejor índice para medir la productividad de un día.
Siempre Sevilla.
Cuando me doy un baño de agua caliente con sales acompañada de mis patitos y velas… Y cuando hago yoga y meditación.
Estar con personas vitamínicas.
Down Dog de yoga y COPE para escuchar a Carlos Herrera por las mañanas.
Reírme de mí misma cuando no me entero de las cosas por mi problema de hipoacusia. He llegado a confundir ‘Irlanda’ con ‘El Landa’ y mis amig@s y yo no paramos de reír por eso durante toda una cena…