En el momento de cambios e incertidumbre que estamos viviendo, especialmente tras la vuelta a la rutina y las obligaciones, el estrés puede convertirse en una sensación más común de lo habitual. Un hecho que, de prolongarse en tiempo, puede dar lugar a problemas digestivos, cardiopatías, insomnio, dolores de cabeza, ansiedad o depresión, entre otros. Un problema que puedes combatir no solo a través de prácticas como el yoga o la meditación, sino también cuidando aspectos tales como la decoración de tu hogar y tu alimentación. Precisamente, sobre este último aspecto nos habla Elisa Blázquez en el número de ¡HOLA! living septiembre.
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Como cada mes, la nutricionista comparte con nosotras sus claves y consejos para ayudarte a sentirte bien a través de lo que comes. Más concretamente, qué alimentos deberías comer para combatir los efectos del estrés. Según nos cuenta, "debemos llevar una dieta rica en vegetales y libre de ultra-procesados. Nuestro organismo necesita muchos antioxidantes y nutrientes para sentirse sano y vital en épocas de estrés".
- Cerezas y fresas: estas frutas son precursoras de la melatonina y la serotonina, por lo que ayudan a que te sientas más relajada y estimulan tus ciclos de sueño.
- Salmón: rico en omega 3, es ideal para fomentar la concentración y el rendimiento intelectual. Pero además, funciona como un antiinflamatorio y cardioprotector natural, reduciendo la taquicardía que pueden provocar el estrés prolongado o la ansiedad.
- Almendras: al igual que los anacardos, las espinacas y el cacao, son ricas en magnesio, un mineral que favorece la relajación.
- Avena: además de regular los niveles de energía y el tránsito intestinal, este cereal es rico en vitamina B, magnesio y tiene un efecto prebiótico. Resulta muy interesante para evitar las subidas y bajadas bruscas de azúcar, ya que aporta energía de lenta absorción.