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Trescientas piezas artesanas hechas a mano. Esa es la propuesta con la que Audrey Marnay ha presentado su marca, Marnay et Fils, un proyecto que nació cuando su deseo de crear y su pasión por la cerámica se encontró con la inspiración que necesitaba. "Quería crear para mi hogar", nos explica la modelo y actriz de raíces francesas entre las páginas de ¡HOLA! living julio. "La idea era construir algo en familia que pudiera legar a mis tres hijos" y la inspiración para su primera colección, Hojas de olivos, la encontró, como no podía ser de otra manera, en Mallorca.
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"Mallorca ha sido durante 20 años el lugar donde consigo regenerarme, y estoy enamorada de sus magníficos olivos. Esos árboles centenarios son pura vida y tienen para mí un profundo significado. De hecho, lo primero que hago cada vez que vuelvo a la isla es tocarlos y sentir su energía, así que fueron la inspiración principal para estrenar mi proyecto". La actriz francesa pisó la isla por primera vez con solo 18 años, y quedó maravillada con la magia y la energía del mar, la montaña y los olivos. "Adoro el estilo de vida de esta isla y tengo muy buenos amigos allí. La comida forma parte de la tierra, hay una especie de conexión con la naturaleza.. y siempre hay un motivo para celebrar".
Cuando le preguntamos sobre sus rincones favoritos, lo tiene claro. Para tapear le encanta ir "al Toque de queda- una curiosa mezcla de bar-fiambrería de espíritu vintage-", y su mercado favorito "está en Santa Catalina. Otro must es el rastro de antigüedades de Consell, que se organiza en domingo".
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Tras vender su primera colección completa en solo dos días, Audrey ya está trabajando en varias miniseries de cerámica que desarrolla en colaboración con un ceramista francés. Y, aunque pretende contar con un artesano específico para realizar cada uno de sus proyectos, está tomando clases de cerámica para hacer realidad su objetivo a futuro: encargarse también de los prototipos.
