Aunque puede parecer que el salón es la estancia principal de la casa, o la terraza de verano durante la época estival, lo cierto es que el dormitorio es el lugar en el que empezamos y terminamos el día después de pasar casi un tercio de la jornada (durmiendo) ahí. Por eso es tan importante poner igual o más atención a la hora de decorar esta estancia. Y es que, existen determinados trucos como la técnica del Feng Shui que pueden ayudarte a dormir mejor y convertir tu habitación en un espacio cien por cien libre de estrés.
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Apuesta por materiales de calidad y la mezcla de texturas
Lo más importante para que tu dormitorio sea lo más confortable posible, es contar con un buen colchón que te resulte cómodo y te permita disfrutar al máximo de tus horas de sueño. Pero además, apostar por tejidos y materiales naturales tales como el algodón o el lino, harán que la experiencia sea mucho más placentera. Un truco muy útil es combinar diferentes texturas y pesos, con cojines de seda, sábanas de algodón muy ligeras y fresquitas y una manta esponjosa, para conseguir una experiencia sensorial única.
Apuesta por el minimalismo
La mesilla es otra parte esencial de tu dormitorio. Un espacio dedicado a colocar la lámpara de noche y el despertador mientras duermes, que en muchos casos termina llenándose de utensilios de todo tipo, desde llaves a joyas, y cualquier objeto que no sepas dónde colocar. Sin embargo, el orden es clave para reducir el estrés y ganar metros cuadrados. Por ello, tu mesilla debería contener únicamente los esenciales: una lámpara auxiliar, un libro o diario y una planta que añada el toque extra de naturaleza.
Convierte tu cómoda en un altar
Una vela aromática, un cojín de semillas y un set de cristales es todo lo que necesitas para crear un altar y convertir tu dormitorio en el mejor rincón para meditar. Una forma de hacer que la energía positiva fluya a lo largo de toda la casa y que, solo con mirarlo, te ayude a sentirte mejor.