El deseo de la sociedad de virar hacia un estilo de vida más sostenible, centrado no solo en la calidad de los productos que se consumen sino también en su procedencia y los métodos e ingredientes con los que han sido preparados, ha llevado a las firmas de belleza a innovar en lo que a la creación y características de sus cosméticos se refiere. Una tendencia que ha fomentado el desarrollo de cosméticos orgánicos cuyos beneficios son palpables no solo en tu salud sino también en la del planeta. Una de las alternativas más extendidas, con la que evitar además el uso de plásticos, son los champús sólidos, la alternativa ecológica a los jabones para el cabello tradicionales.
Los champús secos requieren una cantidad de agua mucho menor que los líquidos, por lo que su formulación está libre de parabenos, siliconas y sulfatos, componentes que pueden dañar el ph natural del cabello. Además, resultan muy fáciles de transportar gracias a su tamaño y por la posibilidad llevarlo en el avión sin problemas, ya que no están limitados a las regulaciones de líquidos. En cuanto a su duración, una pastilla de 50 gramos equivale a un bote de 400 mililítros, por lo que podrás alargar su vida mucho más con la consiguiente reducción de tu huella de carbono.
Uno de los contras que suelen surgir alrededor de esta alternativa natural es su dificultad para crear espuma, un problema que han resuelto desde Válquer Laboratorios gracias a una fórmula innovadora que garantiza una aplicación muy sencilla con efecto espumoso, creada a partir de ingredientes veganos y biodegradables que no generan un impacto en la naturaleza cuando llegan a las aguas. Un producto cruelty free que podrán usar también los más pequeños de la casa, ya que la pastilla familiar de Válquer es apta para niños a partir de 3 años. Una apuesta por la sostenibilidad que incluir a tu rutina de belleza diaria para conseguir una melena fuerte, sana, protegida y reparada.