Casas 'low-tox', la tendencia que arrasa y te hará vivir mejor

A la hora de crear el hogar perfecto, no solo es importante tener en cuenta las claves para aprovechar el espacio al máximo y dar con el olor preciso para convertirlo en una casa de lujo. Tu vivienda es el lugar pasas la mayor parte de tu tiempo de descanso, por eso es tan importante transformarlo en un refugio en el que te sientas cómoda y relajada. Una tarea para la que es imprescindible crear un espacio libre de sustancias tóxicas que sea respetuoso con tu salud y la de tu familia, para que sientas que puedes respirar aire puro sin salir de casa. 

En 2003, Greenpeace publicó un estudio que desvelaba que el entorno doméstico de toda la Unión Europea se había visto expuesto a un creciente nivel de contaminación como consecuencia de las sustancias tóxicas que contienen muchos de los productos que usamos a diario. Componentes que pueden liberarse con el paso del tiempo y, además de perjudicar tu salud, suponen un impacto en el medio ambiente. Para contrarrestarlo, la activista y educadora Alexx Stuart creó en 2010 el concepto Low Tox Life, un movimiento que busca promover el cambio hacia un estilo de vida más saludable, reduciendo nuestra exposición a los productos químicos. En su libro Vida Low Tox, aporta las claves para conseguirlo actuando en cuatro pilares de nuestas vidas: cuerpo, comida, mente y hogar. Siendo este último campo el más fácil de abordar como primer paso hacia un estilo de vida más sostenible y saludable, algo que podrás conseguir con estos cinco consejos.

Crea estancias low-tox

La decoración es uno de los primeros elementos que puedes abordar para crear un hogar low-tox. Además de hacerte con muebles fabricados con tintes y ceras de origen natural e incluir mosquiteras en balcones y ventanas para evitar el uso de insecticidas, existen determinados trucos que puedes aplicar en las diferentes estancias de tu vivienda. En el dormitorio, apuesta por colchones de látex o lana y compra ropa de cama fabricada con fibras naturales como el algodón, ya que otras pueden incluir sustancias químicas como formaldehído, presente en las sábanas de planchado fácil. En el baño, instala una mampara de cristal para la ducha y, si no te es posible, utiliza cortinas de poliéster libres de ftalatos, uno de los contaminantes más extendidos. Añade también un filtro de agua para eliminar el cloro y proteger tu piel y sustituye tus cepillos de dientes de plástico, responsables del 1% de la contaminación de las aguas, por otros modelos de madera. 

La cocina es una de las estancias en la que debes poner especial cuidado, ya que los productos están en contacto directo con los alimentos. Para evitar que los componentes tóxicos se trasladen a tu comida, reemplaza las cazuelas y sartenes de cobre y aluminio, así como los utensilios que contengan antiadherentes o esmaltados. En su lugar, escoge otros fabricadas con hierro colado, cerámica, Titanio o de acero inoxidable sin níquel. Del mismo modo, utiliza tablas de madera y recipientes y tuppers de cristal. 

Evita el uso de velas, ambientadores y bombillas ecológicas 

Aunque las velas y los ambientadores siempre se han considerado como uno de los elementos que te ayudan a crear un ambiente más agradable, son una de las principales fuentes de tóxicos, entre ellos parafinas y plomo. Lo mismo sucede con las bombillas ecológicas que, aunque tienen un menor impacto en el medio ambiente, contienen mercurio, uno de los elementos más tóxicos que existen. En su lugar, puedes crear ambientadores caseros con productos como aceites esenciales, plantas aromáticas e incluso café, y utilizar bombillas incandescentes o LED. 

Fabrica tus propios productos de limpieza

El polvo es uno de los grandes enemigos de un hogar saludable. Para combatirlo, incluye plantas de interior y humidificadores en tu decoración, trata de caminar descalza por casa y limpiar muy bien los zapatos antes de entrar y cambia la ropa de cama una vez por semana. En cuanto a la limpieza, un buen truco es limpiar tus muebles con un paño húmedo que lo elimine más facilmente y evite que las partículas se dispersen en el ambiente. En su libro, Alexx Stuart incluye varias recetas para que puedas fabricar tus propios productos de limpieza, mucho más saludables e igual de efectivos que los tradicionales. 

Aléjate de los aparatos electrónicos 

Aunque nos hayamos acostumbrado a su presencia, los aparatos electrónicos tienen un alto nivel de toxicidad. Para reducirlo al máximo posible, evita dormir cerca de aparatos eléctricos, como tu móvil, tablet u ordenador, y apaga el router durante las noches. Otros gestos que te ayudarán a reducir su impacto sobre tu salud y la de tu familia son mantener los aparatos alejados de tu cuerpo y el de tus hijos mientras ves alguna serie, programa o película (mejor en la televisión o a una distancia prudencial) o conectar tu ordenador a internet a través de un cable Ethernet en lugar del WiFi.

Elimina el plástico y reduce al máximo los residuos que produces

El plástico es uno de los principales contaminantes del medio ambiente pero, además, contiene sustancias tóxicas que pueden afectar a tu salud. Para reducir el consumo de este material, utiliza bolsas de tela para la compra, sustituye los recipientes de plástico por tuppers de cristal y las servilletas de papel por trapos de cocina, cubre los alimentos con telas en lugar de film transparente y, en las fiestas de cumpleaños, prescinde de las pajitas y utiliza platos y cubiertos de cartón o bambú. También es importante que compres productos que puedas reciclar después de su uso o instales un recipiente de compost en tu cocina para reducir al máximo la basura que produces.