El testimonio de Rocío Carrasco continúa, y ya no cabe duda de que su ‘docuserie’ Rocío, contar la verdad para seguir viva ha marcado un antes y un después en la historia de la televisión. Si la emisión del primer capítulo, en el que abordaba parte de su tormentosa relación con Antonio David Flores, paralizó a todo el país frente a la pequeña pantalla, el último episodio de su sorprendente relato tampoco se ha quedado atrás.
La hija de Rocío Jurado y Pedro Carrasco ha decidido romper sus más de veinte años de silencio, y lo hace reuniendo toda la fuerza y el coraje que requiere el abordar algunos de los momentos más duros de su vida. Desde el complicado divorcio de su exmarido, hasta cómo fue perdiendo a sus dos hijos, Rocío y David. En muchas ocasiones, no ha podido contener las lágrimas, pero entre tanto dolor también ha encontrado tiempo para rememorar otros instantes que le han hecho feliz y jamás podrá olvidar. Es el caso de su paso por el programa Hable con ellas , del que ha hablado en el décimo episodio del documental, y que fue motivo de un espectacular posado en ¡HOLA! que protagonizó junto a sus compañeras Sandra Barneda, Marta Torné y Yolanda Ramos.
Un impactante regreso tras más de una década apartada de la televisión
Hable con ellas arrancó en el año 2016. Aquel programa suponía la vuelta de Rocío a la televisión tras más de diez años alejada de la pequeña pantalla. Una década en la que, como ella explicaba a la periodista Roseta L. del Valle, se dedicó a sí misma. “Era un momento en el que me tocaba a mí. Son etapas de la vida...”, explicaba.
“Es muy difícil que entre cinco mujeres que no tenemos nada que ver surja esta complicidad y cariño. Es una verdadera amistad”, decía de sus compañeras de programa
A la hija de ‘la más grande’ le sobraban ‘tablas’ frente a las cámaras. De hecho, con apenas unas horas de vida, en 1977, ya se convirtió en portada del número 1.017 de ¡HOLA!, y además de atreverse con las pasarelas (trabajó en alguna ocasión como modelo), en 1993, con tan sólo 16 años, despidió el año junto a José Mota y Juan Cruz (que formaban el dúo humorístico Cruz y Raya) en Radio Televisión Española.
Sin embargo, su gran momento televisivo llegó unos años más tarde, en 1997, de la mano de María Teresa Campos , a la que, a día de hoy, considera ‘una segunda madre’. La presentadora decidió contar con la joven Rocío en su popular programa Día a día, y desde entonces tanto ella como sus hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego, se han convertido en sus mejores apoyos.
“Soy yo misma... Me muestro tal y como soy”
En el décimo episodio de la docuserie, Rocío Carrasco admite que Hable con ellas le hizo mucho bien y le “dio mucha vida”. Algo que mostró en las páginas de nuestra revista, donde nos contaba que, en el programa, ella se mostraba ante el público tal y como era, sin tapujos. “No hay ningún personaje detrás”, afirmaba.
Sobre sus compañeras, aseguraba que, a pesar de ser diferentes, les unía todo. “Es muy difícil que entre cinco mujeres que no tenemos nada que ver surja esta complicidad y cariño. Es una verdadera amistad”. Y, de hecho, esa amistad se mantiene todavía a día de hoy. La presentadora Sandra Barneda, las actrices Yolanda Ramos y Marta Torné, así como la colaboradora Alba Carrillo siguen contándose entre sus más allegados. Tanto es así que la exmujer de Feliciano López no dudó en participar durante la emisión del nuevo capítulo, y volvió a defender a su amiga en el plató de Telecinco.
Un corte cañero, radical... y con mensaje
El regreso de Rocío a la televisión fue sorprendente, al igual que su corte de pelo. Rocío estrenaba un look mucho más cañero y radical, que escondía un importante mensaje: era el inicio de su nueva vida.
“Me gusta cambiar de look porque soy valiente y me siento segura de mí misma”
“Me gusta cambiar de look porque soy valiente y me siento segura de mí misma, pero nada tiene que ver con mi estado de ánimo… a pesar de que existan pseudoprofesionales que se salten los códigos deontológicos de la psicología diciendo lo contrario”, aseveraba.“Más que vivir rápido, he vivido intenso y eso te forja el carácter, te construye y te forma”, añadía.
Para ella, el 2016 fue “un año magnífico en lo profesional”. “Es el año en que he vuelto a trabajar y me llevo lo mejor, que es conocer gente maravillosa: todos los del equipo, sin excepción”. En este año tampoco faltó su gran pilar y “incondicional” apoyo, su actual marido Fidel Albiac.
“Mi madre estaría muy orgullosa porque vería que estoy haciendo algo que me gusta”
Rocío Carrasco siempre ha tenido a su madre muy presente, no sólo en las fechas importantes, como la de su emotivo boda con Fidel, sino en cada paso que da. Por ello, en su docuserie, una canción de Rocío Jurado da nombre a cada capítulo, y de ella hablaba, también, en esta entrevista. “Estaría orgullosa porque vería que estoy haciendo algo que me gusta. Pero más que orgullosa se sentiría bien, contenta. ¡Y también mi padre”, nos señalaba.