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El aceite de palma se extrae del fruto de una variedad de planta llamada 'palma de aceite'.
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Quien más y quien menos, todo el mundo ha oído hablar de las magníficas propiedades que el aceite de oliva, producto esencial de la dieta mediterránea, aporta a nuestro organismo. Sin embargo, más desconocidos son los beneficios de un aceite cuyo uso se remonta a la época de los faraones y que también es una gran fuente de salud. Se trata del aceite de palma, cultivado hoy en día en los climas tropicales de Asia, Sudamérica y África.
Así, este producto de color rojizo (característica que le distingue del resto de aceites del mercado y que se explica debido a su alto contenido en carotenos) destaca por ayudar al organismo a reducir los niveles de colesterol ‘malo’ en sangre, por funcionar como antioxidante y anticancerígeno y por prevenir la deficiencia de vitamina A (especialmente en épocas de crecimiento). Por otro lado, su alto contenido en unas moléculas llamadas tocotrienoles hacen que su consumo resulte ideal para prevenir el envejecimiento celular o enfermedades como la arteriosclerosis.
Un toque exótico en sus platos
Pero además de sus bondades para la salud, este aceite es perfecto para dar un toque muy sofisticado y atractivo a sus recetas, pudiéndose utilizar tanto para aliñar ensaladas como para freír y cocinar, especialmente a altas temperaturas. Y es que debido a sus características, es difícil que se queme o que se vuelva rancio. Asimismo, su sabor es bastante neutro por lo que no enmascara el gusto de los alimentos a los que acompaña.
Dónde se puede adquirir
Aunque su comercialización en España no está tan extendida como otros aceites, es posible adquirirlo para su uso doméstico en tiendas de dietética especializadas o en establecimientos que ofertan productos de importación de países tropicales.
MÁS INFORMACIÓN
www.aceitedepalma.org
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