El desayuno: la primera comida del día

Es una de las comidas más olvidadas de la dieta y, sin embargo, es fundamental porque, según los expertos, una de las causas del fracaso escolar, de la debilidad física o de los accidentes laborales se deben a un desayuno insuficiente.

Aunque cuando se duerme la actividad del organismo disminuye, no desaparece: el funcionamiento del corazón, la respiración o el mantenimiento de la temperatura corporal, entre otros procesos, implican un gasto energético que nuestro organismo debe reponer.
Pero, además, el desayuno es importante, porque contribuye a mantener un buen nivel de rendimiento durante la mañana. Si no se desayuna lo suficiente, el nivel de azúcar baja y se produce un fenómeno conocido con el nombre de hipoglucemia, cuyos efectos inmediatos son la fatiga y la dificultad para concentrarse. Una de las causas del fracaso escolar, la debilidad física o, incluso, los accidentes laborales se deben a un desayuno insuficiente.

Según los expertos en nutrición, el aporte energético del desayuno debe ser de un 20% a un 25% del valor calórico total de la dieta, además debe ser variado. Es el momento ideal para consumir productos lácteos, ricos en calcio; zumos de frutas, excelentes fuentes de vitaminas, y cereales, que aportan fibra e hidratos de carbono.


Las bebidas del desayuno:

• El café: su principal característica es que contiene cafeína, una sustancia estimulante que aumenta la percepción sensorial, favorece la actividad intelectual y disminuye la sensación de fatiga. Actúa como un eficaz diurético y produce un aumento del número de los latidos cardiacos, con tendencia a aumentar la tensión arterial.


• El té: uno de sus componentes es la teína, una sustancia con propiedades tonificantes y estimulantes. Es un diurético suave, estimula el movimiento intestinal y es muy bien tolerado por la mucosa gástrica.


• La leche: es fundamental en la alimentación infantil. Su aporte calórico no es excesivo y, si se toma descremada, es ideal para una dieta hipocalórica. Su composición alcalina neutraliza la acción de los ácidos del estómago.


• El chocolate: es un alimento tradicionalmente incluido dentro del grupo de los energéticos, una cualidad que hace de él un producto muy indicado para aquellas personas que practican deporte o tienen una actividad física importante. Por esta razón es habitualmente incluido en la dieta de los niños y adolescentes, a los que, además, por regla general, les encanta.