|
Viajar por las rutas del vino es una excelente manera de hacer turismo.
|
|
El vino elaborado por las bodegas 'Martínez Bujanda', en La Rioja, son un buen ejemplo de la excelente calidad de los caldos españoles.
|
|
Degustar un delicioso vino mientras se disfruta de un viaje inolvidable. Se llama enoturismo y para muchos es el plan perfecto cuando de ocupar el tiempo de ocio se trata. Las ofertas en este sentido son cada vez mayores y más interesantes e incluyen diversas actividades: realizar visitas a bodegas, catas, degustaciones gastronómicas, hospedarse en hoteles-bodega rodeados de viñedos, adentrarse en la historia y tradiciones de cada pueblo que se visita... A continuación le mostramos un resumen de los principales destinos a los que podemos viajar a nivel internacional y donde es casi una ‘obligación’ catar sus vinos:
EUROPA
Sólo en España, el aficionado al mundo del vino tiene multitud de posibilidades a la hora de elegir el lugar ideal para su ‘escapada enoturística’: desde los magníficos vinos de La Rioja hasta los de la Ribera del Duero, los de Jerez, el Penedés, etc, todos ellos de excelente calidad y fama internacional.
Continuamos recorrido por el vecino Portugal, donde encontramos algunas propuestas muy interesantes : en el noroeste se halla la región del Douro (Duero) con caldos excepcionales. Tampoco podemos perder de vista en este país sus fabulosos oportos, vinos únicos que nos dejarán un dulce sabor de boca.
Al otro lado de los Pirineos encontramos en Francia, más que un país, una enorme región productora de excelentes caldos. Tal vez las zonas más conocidas sean las de Borgoña, Burdeos y Champagne. También resulta realmente interesante la región de Beaujolais que da nombre a la gran fiesta del vino nuevo (Beaujolais nouveau) celebrada a finales de noviembre y durante la que toda Francia se viste de gala para dar la bienvenida a los jóvenes vinos del año.
En Italia, la producción también se reparte prácticamente en toda la península aunque quizá la zona vinícola más turística es la Toscana donde se pueden degustar los famosos Chianti y Brunello, los vinos toscanos por excelencia. Por último, no podemos pasar por Hungría sin probar sus Tokaj o por Alemania sin degustar sus famosos vinos del Rhin.
|