Tras desvelarte cuáles son las 30 marcas de invitada con sello español que debes conocer para triunfar en tu próxima boda, hoy es el turno de los zapatos. Nuestro complemento favorito, aquel que adoraba el personaje de Carrie Bradshaw y que puede cambiar por completo la imagen del look, es nuestro protagonista del día. Sea cual sea la tendencia que buscas esta temporada, desde las bailarinas hasta los botines y botas de tacón y las zapatillas que podrás llevar incluso para ir a trabajar, es el momento de fichar las firmas nacionales que necesitas añadir a tu zapatero para estar a la última y apoyar al talento del país.
Alohas
La gran idea que tuvo Alejandro Porras vio la luz en Hawai, allá por 2015, aunque se consolidó en la ciudad de Barcelona con ya varias aperturas de tiendas. Alohas se ha convertido en el mejor ejemplo en cuanto a calzado sostenible alrededor del mundo, sus diseños de supertendencia que adoras las influencers, están creados con materiales que respetan el planeta, desde la piel vegana a los detalles más pequeños.
Flabelus
"Flabelus son los zapatos madrileños" así los bautizan sus amantes fuera de la capital, y es que la visión de su fundadora, Beatriz de los Mozos, ha traspasado fronteras otorgándole a las bailarinas ese poder mágico, tanto que no hay quien no conozca ya la marca. En sus tiendas podemos encontrar todas las tonalidades que imagines, combinaciones, apliques, tejidos... Son auténticas fantasías que encajan con infinidad de tipo de looks, tanto para ir a una boda como para la oficina.
Mascaró
En la localidad menorquina de Ferreries, en 1918, nació Mascaró como un taller artesanal de zapatillas de ballet. Ahora, con la dirección de la tercera generación familiar y un amplio abanico de opciones de gran calidad y con maravillosos zapatos artesanos para todos los meses del año, se posiciona como una de las marcas con más recorrido del país, ¡colándose incluso en los armarios de reinas y princesas!
Hoff
De comenzar como una start up a ser una de las marcas de zapatillas más conocidas de nuestro país. Hoff, la empresa de Miguel Botella y Fran Marchena que comenzaron en 2016, ha crecido como la espuma y una de las razones se esconde en la comodidad de sus diseños para recorrer las calles horas y horas en tus viajes, pero también por sus cortes unisex y atemporales que siempre triunfan.
Martinelli
Con el objetivo de convertirse en el 'lujo razonable' fuera y dentro de España (concretamente de Elche), Martinelli han seguido creciendo cinco décadas después de su comienzo. Aunque su idea principal estaba enfocada en el calzado masculino, con el paso del tiempo la marca se adentró en el armario femenino por todo lo alto, tanto que ahora realizan colaboraciones especiales de manera esporádica demostrando el poder y la elegancia que tienen.
Micuir
La sostenibilidad y la artesanía son las bases principales de la pirámide de Micuir, el referente en cuanto a botas y botines de piel más bonitas de las redes sociales invierno tras invierno. Su fundadora, Elena Peña, se lanzó al mundo del emprendimiento dejando su trabajo anterior y sumergiéndose en esta aventura para colaborar mano a mano con los artesanos y dar vida a piezas con sello slow fashion.
Diplomatic
Fue en 2016 cuando Rodrigo Fernández tuvo su primer contacto con el taller que daría forma a aquel calzado que tenía en mente, aunque su primer pedido fueron 10 unidades para amigos y familiares. Tiempo después, y bajo el nombre de Diplomatic, dio forma a su sueño, y con la experiencia comenzaron a incorporar las alpargatas y hacerse fuerte en este tipo de prototipo hasta día de hoy que abogan por la calidad, sencillez y atemporalidad.
Augusta
Las hermanas Paloma y Cristina Rato quisieron dar el salto en la primavera de 2020, y tras probar suerte, hoy puede presumir de tener la firma Augusta y crear las merceditas y las Mary Jane con la 'piel de mantequilla (¡y más suavita!)' más especial del mercado. Las fabrican en Elda, pero sus diseños divertidos con ese toque retro no pierden su alma asturiana, tanto que colgaron el cartel de 'agotado' en plena era de confinamiento.
Lola Cruz
“Nunca sale un par de zapatos de nuestro atelier sin habérmelos probado antes” dice Maria Jesús Gozalvo, fundadora y Directora Creativa de Lola Cruz. Con una mente creativa y la herencia por parte de su padre por la pasión por el mundo del calzado, lanzó su primera colección en el año 2000 con 30 diseños que representaban a cada una de las mujeres que admiraba y tenía a su alrededor.
Pedro Miralles
Todo lo que cuelga la etiqueta de Pedro Miralles, es el resultado de un legado familiar y una gran lista de éxitos tras más de 60 años de vida. Con colecciones para toda la familia, e incluso lanzamientos especiales y de manera puntual enfocados a novias, es una de las firmas de calzado más reconocidas y presenten en el panorama nacional que sigue abogando por los mismos valores fusionando la tradición y las tendencias temporada tras temporada.
Carmina Shoemaker
¿Más de 150 años de historia? ¡Sí! Esa es la gran presentación de Carmina Shoemaker, el entonces taller que comenzó con el sueño Matías Pujadas, abrió en Mallorca para crear zapatos a medida. Y en el año 1997, con seis generaciones después de trabajar en este sector y construir fábricas, se funda la que hoy es conocida como la marca que adoran quienes buscan elegancia y sencillez, que continúa triunfando con sus propuestas.
Saye
Aunque su sede está en Barcelona, las zapatillas veganas de Saye ya están paseándose por todos los rincones del planeta. Sí, como has leído, sus diseños que protegen al medio ambiente salieron a tierra en febrero de 2017 (aunque con otro nombre, Wado, que terminó cambiándose en agosto de 2019) gracias a la unión de Marta, Lizzie y Damian. "Se produjeron los primeros 7.000 pares de zapatillas y se convirtió en el proyecto de moda española más financiado de la historia en Kickstarter" explican.