Esta semana, las miradas de los amantes de la moda están puestas en Milán, pues desde el 17 de septiembre y hasta el 23 de este mismo mes, se celebra la fashion week de la capital. Período durante el que, además de fichar las tendencias clave para la próxima Primavera/verano 2025, nos deleitamos al ver cómo las caras del momento se reúnen en el mítico front row de los diseñadores más reputados. Sabato de Sarno, director creativo de Gucci, nos convenció ayer con un show inspirado en la fugacidad del tiempo y el hecho de vivir al máximo. La puesta en escena se llevó a cabo en el museo Trienal, espacio de fusión entre arte y estilo que nos ofreció algo que no sabíamos necesitar: la reunión Bridgerton más especial.
Las intérpretes Nicola Coughlan (en el papel de Penelope Featherington en el fenómeno serial) y Hannah Dodd (siendo Francesca Bridgerton) se dejaron ver en la presentación y nos regalaron uno de esos reencuentros que dan de qué hablar. Se sentaron junto a sus compañeras de profesión Dakota Johnson y Daisy Edgar-Jones y adelantaron, por supuesto, dos fórmulas muy distintas de acoger la corriente boho chic que promete marcar la industria de ahora en adelante.
La irlandesa, por su parte, se presentó en el evento enfundada en un minivestido camisero con fina lazada en el cuello. Un básico que, en realidad, podremos llevar durante las semanas de entretiempo siguiendo los consejos de la estrella de Derry Girls. La misma nos aconseja combinarlo con la prenda alternativa (e igualmente acertada) a la chaqueta en ante que está incorporando toda insider en su armario para este Otoño/invierno 2024-2025.
Coughlan se decantó por una capa atada al cuello con hebilla metálica y aberturas frontales simulando bolsillos. Completó la apuesta con bolso de cadena en cherry red, tonalidad que no puede faltar en la colección de una buena experta en corrientes estilísticas, y zapatos de tacón en verde pistacho con incrustaciones de flecos brillantes.
Dodd, por la suya, cautivó con un look casual configurado a partir de una camisa blanca con lazo, detalle romántico que también lideró la ecuación de la cinéfila que vimos en Barbie. Remató la relajada propuesta con lencería de encaje visible, vaqueros de perneras holgadas, cinturón y bolso de mano en marrón y calzado con puntera en pico. ¡Dos opciones de estilismo idóneos para abanderar la estética desenfadada que tanto furor causa!