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Aunque están emparentadas con una de las familias reales más importantes del mundo, Eliza y Amelia Spencer se han mantenido en un segundo plano respecto a la corona británica, desde que de pequeñas se trasladaron a Sudáfrica a vivir con su madre, tras el divorcio de esta y Charles Spencer, hermano de la desaparecida princesa de Gales. Convertidas a sus 31 años en influencers de moda, las gemelas se dejan ver a menudo en la escena londinense, acudiendo a fiestas especiales y presentaciones de marcas con las que trabajan. Eventos en los que las sobrinas de Lady Di, gemelas idénticas, suelen realizar guiños a su increíble parecido a través de la ropa, pues es frecuente verlas coordinar sus estilismos, rindiendo incluso a veces pequeños homenajes al vestidor de su tía.
© Getty ImagesAmbas no tienen miedo de arriesgar con las tendencias más vistosas, luciendo brillantes vestidos o fastuosas joyas en sus diferentes citas. Y anoche volvieron a demostrarlo durante una visita a la Galería Nacional de Londres, uno de los principales museos de arte de la ciudad, donde la cadena de joyería Boodles -firma de la que son embajadoras- celebraba el lanzamiento de su nueva colección. Una ocasión en la que aprovecharon para desmarcarse de sus habituales elecciones parecidas entre sí, para sorpredernos con dos apuestas de invitadas muy diferentes, que te inspirarán sea cual sea tu estilo.
© @elizavspencer- Amelia y Eliza Spencer impactan con sus tocados y joyas XL en la hípica de Australia
Eliza se decantaba por un vibrante verde primaveral con un vestido largo de cuello redondo con transparencias en el cuerpo, que destacaba por su pronunciada abertura en la falda, así como por las plumas que bañaban la tela, salpicada de pequeños destellos brillantes. Una creación de la diseñadora australiana Rachel Gilbert que combinaba con unas sandalias metalizadas de tacón.
© @ameliaspencer15- Las impresionantes joyas que Eliza y Amelia Spencer combinan con trajes de Alta Costura en Londres
Al parecer, las transparencias eran lo único en común que tenían los conjuntos de las hermanas, pues Amelia decidió recurrir a un total look en negro, también con vestido de manga larga, pero en su caso con una elección más sobria. Se trataba de un diseño ajustado que fusionaba un LBD con una sobrepieza de gasa hasta los tobillos, adornada con cristales ovalados. Un vestido obra de Alexander Wang, que llevaba con unas originales sandalias transparentes con suela de tachuelas.
