Hace unos meses, con motivo del estreno de su documental para una plataforma de streaming, ya pudimos comprobar que la familia Pombo es inseparable, que todos se llevan de maravilla y, como nos hacen ver siempre a través de sus redes sociales, se juntan siempre que pueden. Y hoy, que se ha celebrado uno de los días más especiales para María y para su marido Pablo Castellano, no podía ser menos. El matrimonio bautizaba esta mañana a su única hija, una niña llamada Vega que nació el pasado mes de junio y nadie ha querido perdérselo, especialmente, su tía Marta que se convertía en su madrina.
Así, la hermana mayor de María Pombo ha acudido junto a su marido, el odontólogo Luis Zamalloa, a la parroquia de Santa María del Bosque de Madrid para ver el primer sacramento de la pequeña Vega. Los dos han ejercido de padrinos, por lo que la cita ha cobrado, si cabe, más relevancia para ellos. La influencer ha posado muy sonriente junto a su hija Matilda, la primera y única en común junto a Luis, con quien ha rehecho su vida felizmente después de divorciarse de Luis Giménez.
Para este día tan especial, Marta se ha decantado, al igual que su hermana María, por un vestido de la firma española IQ Collection, aunque eso sí, totalmente diferente. Mientras que esta última optaba por un diseño con estampado de cuadros tartán, Marta optaba por una pieza sobria en color gris con botones delanteros. El modelo, Benedict Topo, de inspiración lady y disponible en la web de la firma (225 euros), además de contar con una original falda con revuelo leve, tenía como detalle una doble hebilla de cuero en la cintura.
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Para completar su estilismo, la influencer, ha preferido no arriesgar y seguir en la misma gama de colores escogiendo un bolso pequeño de cuero negro tipo maletín y unas botas altas del mismo tono. En cuanto al beauty look, ha seguido en esta misma línea de sencillez y sobriedad, dejándose la melena suelta al natural y maquillándose los ojos en un tono marrón muy favorecedor.