Hace tiempo que las embarazadas dejaron de utilizar solo ropa premamá para incorporar en sus armarios diseños de tendencia de sus firmas favoritas (algunas tallas más grandes de las que usan habitualmente). Basta un breve vistazo a las redes sociales de influencers como María Pombo o María Fernández-Rubíes, que dio a luz hace unos meses, para confirmarlo. Pero si hay una celebrity que ha revolucionado el armario femenino con sus embarazos esa ha sido Rihanna. Desde que anunció en la pasada Super Bowl, enfundada en un mono rojo de Loewe, que estaba esperando a su segundo hijo, la de Barbados nos ha dejado algunos looks de lo más sorprendentes. El último en la Ultra Beauty Convention, donde apareció con un total look blanco muy inspirador.
La cantante acudió a esta convención como representación de su firma Fenty Beauty y eligió para la ocasión un conjunto compuesto por un top de cuello alto que se ceñía totalmente a su nueva figura y que combinaba con una de las prendas estrella de esta primavera: una falda larga. La suya, de color blanco, con acabado satinado y un poco de cola, contaba con una sensual abertura que debaja a la vista su calzado, unas sandalias de tiras también del mismo tono. Una de las elecciones más llamativas de este look fue la prenda de abrigo que eligió para lucirlo. Para dar un toque algo más informal al conjunto, Rihanna se decantó por una cazadora (de color blanco) de la firma Courrèges con escote redondo bastante pronunciado.
Muy de tendencia fue también el peinado con el que culminó el estilismo. Desde hace varios meses te estamos contando que los peinados Y2K, esos inspirados en los que muchas llevamos en los 2000, se habían convertido en los preferidos no solo de las integrantes de la generación Z, también de expertas de estilo como Chiara Ferragni. Rihanna se ha sumado a esta tendencia al apostar por un semirrecogido que dejaba sueltos dos mechones bastante pulidos que enmarcaban su rostro.
El estilo premamá de Rihanna
Durante su primer embarazo la cantante ya dejó claro que su tripita se iba a convertir en el centro de todos sus looks. Fue entonces cuando la vimos enfundada en un vestido de plumeti, con claras referencias a un camisón, que dejaba a la vista su conjunto de lencería. Una elección con la que acudió al desfile de Dior en el marco de Paris Fashion Week. Con el segundo, Rihanna parece confirmar que no ha cambiado de idea. A mediado de marzo eligió para pasear por West Hollywood junto a su pareja, ASAP Rocky, un polo que días antes había llevado Hailey Bieber. Un diseño de la marca española Loewe (modelo de la colección Primavera/Verano 2023, 750 euros) que combinó con unos jeans de tiro bajo, unas botas de montaña de Timberland y un bolso cuadrado de mano.
También durante la pasada edición de los Premios Oscar presumió de barriguita. La cantante, que se cambió de look hasta en tres ocasiones, se decantó en primer lugar por un vestido negro de Alaïa, compuesto por una falda y top de piel, con transparencias en la zona central y en los brazos. Una prenda que sustituyó por un conjunto en tono agua y, después, por un dos piezas compuesto por un top de gasa y pedrería (de largo asimétrico) y un pantalón de encaje floral.