A veces nos complicamos mucho a la hora de elegir las prendas o colores que llevar sin darnos cuenta de que en la sencillez, también está la perfección. Basta con recurrir a dos colores clásicos para crear un buen look. Rosie Huntington-Whiteley lo sabe bien y por eso, ha optado por el blanco y negro para una de sus citas más importantes: la apertura de un pop-up en colaboración con el minorista de belleza Space NK, donde mostrará durante varios días los nuevos productos de su marca de belleza, Rosie Inc. Un momento especial para la modelo, que se celebró en el Covent Garden de Londres y al que acudieron diferentes personalidades del mundo de la moda y la belleza.
Analizamos el armario de Rosie Huntington-Whiteley, el perfecto ejemplo de 'lujo silencioso'
Blanco para el día...
Rosie Huntington-Whiteley acertó de pleno durante el día al apostarlo todo al blanco en la inauguración de esta tienda temporal. Un color básico, pero que resalta como ningún otro las facciones y las pieles morenas. Así, la top escogió un vestido largo y ajustado al cuerpo precioso y que le quedaba de maravilla. Un diseño de la colección de Pre-fall de Khatie, elaborado en viscosa que nos ha dejado impactadas por su escote en la espalda a base de tres tiras con cristales de Swarovski. Una apuesta por el brillo al que sumó los pendientes largos de diamantes y el resto de joyas de Jessica McCormack. ¿Su beauty look? La melena recogida en un moño tirante de bailarina con la raya en medio para que se pudiera apreciar la abertura de la espalda, y un maquillaje con el que sobre todo resaltó sus ojos gracias al efecto smokey eyes.
La elegancia eterna del negro y otras tendencias de las invitadas 'top' a la gran fiesta de FASHION
Negro para la noche
Horas más tarde, la modelo cambió radicalmente de estilo y se decantó por un color opuesto. Como no podía ser de otra forma, el negro volvió a ser el preferido para la fiesta de por la noche. Así, lució un total look de Prada que que ya vimos en pasarela en la colección de otoño 2022, y que constaba de un jersey básico, un blazer oversize y la prenda más especial que transformaba el look en un lookazo: una minifalda de paño con una malla brillante con efecto arrugado. Para completar el estilismo, unos salones clásicos negros, de la misma firma italiana. Esta vez, prefirió dejarse el pelo suelto, también con la raya en medio.