Rocío Gallardo y Jorge Ros, con formación en diseño de moda y diseño de producto respectivamente, tenían una profesión en la que pasaban horas delante de la pantalla. Su lado creativo hizo que poco a poco una idea fuera tomando forma en su cabeza. Al principio, como un horizonte lejano sobre el que fantaseaban en alguna conversación, después como una meta definida y cada vez más próxima. Así nació Simuero, una firma valenciana de joyería que realiza piezas bajo pedido de manera artesanal. Las piezas han conquistado incluso a Kendall Jenner, la modelo más cotizada de la industria con acceso a todo tipo de marcas, convertida en fan incondicional de este sello español.
"Teníamos claro que queríamos fabricar nuestras propias piezas, fueran de joyería, de cerámica o cestas… El verdadero entendimiento de un objeto llega cuando eres parte de la fabricación y tienes que entender los límites del propio material que de golpe te pone los pies en la tierra. El metal y sus posibilidades nos atrajo y nos quedamos en esta disciplina, la idea de poder llevar un objeto que fabricáramos nosotros nos conquistó", explica Rocío, cofundadora de la marca, a FASHION.
El proceso de creación de cada una de las piezas no sigue los pasos tradicionales, no hay fase de boceto, más bien se parte de una idea cambiante en función del material, una estrategia práctica a la que llegaron como resultado de un ejercicio de prueba y error: "Gracias a fabricar nos hemos dado cuenta que de nada sirve pasar tiempo delante del papel porque el material manda" y no olvidan que una parte importante del proceso es "pasar horas delante del material, moldearlo, romperlo, buscar su límite para encontrar el punto medio entre lo que tú quieres transmitir y lo que él te puede ofrecer".
Como se puede intuir indagando en las campañas de la firma, la naturaleza es una constante inspiración en Simuero. "En el entorno natural tienes clases gratuitas de belleza", explican sobre esta fuente inagotable de ideas "y formas infinitas que muchas veces resultan incluso imposibles de replicar por lo que únicamente nos centramos en el concepto y sobre eso desarrollamos las piezas".
Materiales reciclados y piezas bajo pedido
La firma no se reivindica como sostenible porque es obvio que las raíces de esta marca que no acumula stock están vinculadas a la idea de la moda lenta. "Seríamos 100% sostenibles si no existiéramos. Sin consumir, sin gastar energía en cada proceso artesanal que realizamos, sin realizar envíos", escribían en un mensaje en sus redes sociales con motivo del día de la naturaleza el pasado 3 de marzo. Esta forma honesta de entender la moda se suma a un modelo de negocio que realmente busca reducir el impacto medioambiental. Proximidad (el proceso de fundición está externalizado pero el resto fabrican cada pieza en su taller, dedicando al menos 2 horas a cada diseño), economía circular (reciclan cada gramo de material incluido el packaging) y un ritmo de producción alejado de la fabricación en masa definen la filosofiía de Simuero. "No tenemos colecciones programadas, ni fechas estrictas porque era justo de lo que queríamos escapar al comenzar este proyecto", añaden desde la marca.
Cuando empezaron, dieron con un proveedor local con una gran cantidad de coloridas piedras sintéticas de los años 60 y 70. Se las compraron todas y crearon piezas como el anillo Lago. Ahora, con una clientela más amplia buscan "proveedores certificados y muchas de las piedras preferimos que sean sintéticas para evitar la minería en zonas sensibles. Para nosotros es fundamental tener garantías sobre cada detalle de nuestra fabricación".
En el joyero de Kendall Jenner
Las piezas están elaboradas en plata con baño de oro (excepto las del servicio Customize de joyas personalizadas de oro amarillo y oro blanco) y "pensadas para toda la vida". Hay anillos, pendientes y medallones, todos con un aspecto artesanal de formas irregulares. La top Kendall Jenner ha apostado por la marca en varias ocasiones, una de las últimas veces hace apenas unas semanas para asistir al partido de la Super Bowl, cuando eligió los pendientes Gamba, unos pequeños aros dorados. No era la primera vez que los llevaba, el pasado octubre también se los puso, combinados con otra pieza de Simuero, el anillo Boya en color negro. "Cuando nos contactaron [Kendall y su estilista] nos pareció una broma de algún amigo, no nos creíamos la amabilidad, la cercanía y lo generosas que han sido con nosotros. Estaremos siempre agradecidos a ambas". A la hora de preguntarles a quién más les gustaría ver con piezas de Simuero, responde su fan interior: "a Rosalía, Rigoberta Bandini ¡y a todos los actores de Euphoria!".
De momento, esta firma independiente tiene un pequeño equipo de seis personas pero la idea es ir ampliando la "familia" a medida que se consoliden. Teniendo en cuenta que Rocío y Jorge no crean ninguna pieza que no llevaran ellos, las colecciones no están pensadas para ningún género y aunque en la actualidad las mujeres son sus principales compradoras, sí han notado "cada vez más aceptación por parte de hombres, ojalá que lleguemos a no saber quién viste más nuestras piezas y sea algo secundario". El próximo mes de mayo se cumplirán tres años desde que la marca vio la luz y de momento, este apuesta independiente por la joyería artesanal se mantiene ajena a las tendencias efímeras. Si Simuero ha conseguido imponerse a las dificultades de los primeros tiempos, con una pandemia incluida, y llegar al otro lado del charco conquistando a Kendall Jenner y a otros iconos como Iris Law o Leandra Medine Cohen, su futuro cercano promete, y mucho.