Con solo 25 años, ha sido musa de Jean Paul Gaultier y Marc Jacobs, ha desfilado para marcas de lujo como Versace o Bottega Veneta y ha sido imagen de Svarowski. Un currículum que no para de crecer y que ha colocado a Lourdes Leon en el punto de mira de algunas de las marcas más exclusivas del momento, que ven en la hija de Madonna a una de las nuevas promesas del mundo del modelaje. Y, aunque durante el último año su trayectoria se ha alejado de las campañas publicitarias para dar el salto a los desfiles de lujo, la modelo no ha dejado de lado este campo, convirtiéndose recientemente en imagen de una conocida firma española.
La nueva campaña de Lourdes Leon para Bimba y Lola
Bajo la dirección creativa de Isamaya Ffrench, las órdenes de Carlos Sáez y con el nombre de #thisisTECHNONATURE, Bimba y Lola presentaba recientemente la campaña para su nueva colección. Portagonizada por Lourdes Leon, la campaña recuperea el mito de Adán y Eva y traslada a la modelo a un espacio lleno de naturaleza iridiscente en el que luce diferentes prendas y accesorios de la marca. Una dimensión a medio camino entre la realidad y la ficción donde, en palabras de la propia marca, "lo virtual, lo natural y lo humano se unen, y los límites con la fantasía desaparecen". Una clara apuesta por esa nueva imagen atrevida, natural y rompedora que tanto atrae a la Generación Z y de la que Lourdes se ha convertido en un perfecto exponente.
La nueva promesa del modelaje
Su debut como modelo tuvo lugar en 2016 de la mano de Stella McCartney y pisó la pasarela por primera vez en 2018. Desde entonces, Lourdes no ha hecho sino cosechar éxito tras éxito. Pero ha sido este año cuando la hija de Madonna se ha consagrado como uno de los rostros más buscados del mundo de la moda. Tras participar en el desfile de Savage x Fenty, cuyo estreno tuvo lugar el pasado mes de octubre en la plataforma Amazon Prime Video, Lourdes dio el salto a las pasarelas de las firmas de lujo, donde compartió escenario con nombres como el de Gigi Hadid, Irina Shayk o Naomi Campbell. Una carrera que parece haber despegado con gran fuerza y que le ha valido su primera invitación a la Gala Met por derecho propio, y no como acompañante de su madre.