Si eres una auténtica seguidora de la moda, sabrás que es cíclica y, como un viaje constante en el tiempo, las tendencias pasadas vuelven a llevarse una y otra vez. Todo aquello que se llevó hace aproximadamente 20 años -o incluso antes- regresa al ruedo con una versión más actualizada que conquista a las expertas en materia. De ahí a que algunas tendencias con sello vintage hayan aterrizado este verano en las maletas de vacaciones más exclusivas, como el bikini-joya o los vestidos de lentejuelas para ser la invitada más original del evento. Y a pesar de que las grandes casas de costura suban a la pasarela sus diseños más virales, en realidad son las influencers, estilistas o incluso las royals europeas quien demuestran con sus estudiados estilismos cómo adaptarlas al día a día de forma discreta. Y el ejemplo más sofisticado sobre cómo lucir el pañuelo a la cabeza con estilo, es aquel que reúne a tres de las mujeres más elegantes la histórica Casa Real de Mónaco: Grace Kelly, Carolina de Mónaco y Carlota Casiraghi. Todas ellas han llevado este accesorio que arrasa en 2021.
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Este sencillo complemento ha sido el que ha revolucionado los parámetros de la moda estos meses de sol, y con ello, sus estilismos a pie de playa y piscina. Un trozo de tela, normalmente estampado, es definitivamente la pieza que puede solucionar de forma express cualquier look aportando ese toque glamuroso que lo hace tan diferenciador e inspirador. La princesa de Mónaco ya lo hizo en 1955 durante el rodaje de la famosa película Atrapa a un ladrón en la Riviera Francesa a conjunto de un bañador blanco. Y su hija, Carolina de Mónaco siguió sus pasos un par de años después durante una escapada romántica con su entonces marido, Stefano Casiraghi, a Saint-Tropez a finales de los ochenta.
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En cambio ella se decantó por una estética totalmente diferente, una imagen mucho más rockera para disfrutar de un día en alta mar para el que optó por una bandana con motivos blancos, un bañador efecto cuero y unas gafas de sol circulares. Un look que ha pasado a la historia como uno de los más inspiradores porque se sale de las propuestas clásicas de la realeza. Pero no todo queda aquí; las royals monagescas son conocidas por haber mantenido una estrecha y consolidada relación con los grandes diseñadores. Grace fue musa de Christian Dior, Carolina de Karl Largerfeld y Carlota Casiraghi se casó con nada más ni menos que con tres diseños diferentes de sus firmas de cabecera: Saint Laurent, Chanel y Giambattista Valli.
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Y sí, ella también mantiene amistad con varios de los rostros más conocidos del sector; por esta razón es una de las invitadas más esperadas a los desfiles de la Semana de la Moda de París. Es un hecho que Casiraghi tiene un buen ojo en cuanto a estilo y ficha las tendencias más elegantes para sumarlas a sus looks sobrios, como lo hizo hace más de un año con el mencionado pañuelo anudado a la cabeza. Aunque lo añadió a una versión más otoñal, la nieta de Grace Kelly ya predijo que éste sería la compra estrella del momento, ¡apto incluso para un bad hair day! Y ahora he aquí la pregunta... ¿Quién se inspira en quién? ¿Las casas de moda en los impecables estilismos de las royals? ¿O las royals en las pasarelas más codiciadas de la industria?