Siguiendo el camino de las influencers de moda que saben aprovechar su éxito en redes, Amelia Windsor también ha dado el paso hacia el otro lado y se ha convertido en diseñadora. La prima de los príncipes Harry y Williams, de 24 años, lleva desde los 19 trabajando como modelo. Entre sus primeros trabajos, una campaña para Dolce & Gabbana en la que compartía plano con otra royal adorada por la moda, Olympia de Grecia, y que ya anticipaba un éxito en la industria que ella ha sabido reconducir hacia aquello que le preocupa, el cuidado del planeta.
- El de Amelia Windsor y otros vestidos de 'vichy' que hacen tipazo
Una 'royal' concienciada con la moda sostenible
A través de sus redes, donde se acerca a los 90 mil seguidores, Amelia Windsor se ha convertido en toda una embajadora de la moda sostenible. Las prendas que luce -y etiqueta- a menudo pertenecen a firmas concienciadas con el mantenimiento del medioambiente y la reducción del impacto que esta industria tiene en el planeta. Un rasgo que define a la Generación Z, a la que ella misma pertenece, pero que, afortunadamente, se está convirtiendo en tendencia para el consumidor general. Así lo han demostrado los nuevos lanzamientos de firmas como Uniqlo, Mango o Zara, y también el éxito de marcas como las que esta joven royal apoya y para las que ahora presta tanto su imagen como su creatividad.
Aunque no es la primera vez que Lady Amelia Windsor adopta el papel de diseñadora -en 2019 ya lanzó una cápsula de joyas junto a la firma británica Tada & Toy-, los proyectos de los últimos meses confirman su interés en situarse en esa parte de la industria. El pasado otoño, repetía en la sección de joyería con una colección de seis piezas inspiradas en la naturaleza para Alice Van Cal, casa de la que es embajadora, así como una mini colección de punto, bautizada como Amelia Windsor x Brora, cuyos fondos se destinan a la protección del fondo marino. Esta primavera, amplía su portfolio de colaboraciones por partida triple y, de nuevo, con piezas muy variadas aunque todas ellas sostenibles y artesanales.
De ropa interior a complementos: Amelia Windsor planea conquistar la moda (eco)
La primera de las colaboraciones primaverales de la royal británica es un conjunto de ropa interior diseñado junto al equipo de Alexander Clementine. Está confeccionado con los materiales naturales que siempre utiliza esta firma británica, concretamente con SeaCell (derivado de las algas marinas) y Tencel (de los árboles). Como la propia Amelia explicaba, "ambas fibras provienen de recursos regenerativos y la tela mantiene los beneficios para la salud de las algas como las vitaminas A, C, E y B12 que son muy buenos para la piel". Pocos días después, desvelaba otro proyecto muy diferente: un bolso que lleva el diminutivo de su nombre, Mel, y que la consagra, de cierto modo, al mismo estatus que Lady Di o Grace Kelly, el de las royals que dieron nombre a este accesorio.
El bolso Mel es una creación de la casa londinense Been que, desde la piel exterior hasta el forro interior y las piezas metálicas, está conformado por materiales reciclados. Además, por cada pieza vendida (cuesta 342 euros, aproximadamente) se plantará un árbol de Moringa en el Amazonas. Una filosofía de sostenibilidad que completa la tercera colaboración que Amelia suma esta temporada, la colección en edición limitada de tops de seda reciclada creada junto a la firma portuguesa Yarden para la plataforma Edis. Con razón la definen, desde esta última, como una "apasionada de la moda sostenible".