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Tras su maratón de estilo durante el Royal Train Tour, Kate Middleton y el príncipe Guillermo han querido dar el pistoletazo de salida a la época navideña con una cita en familia muy especial. Así, los duques de Cambridge acudían este fin de semana al London Palladium junto a sus hijos, George, Charlotte y el más pequeño Louis, para asistir a Pantoland, un espectáculo muy popular en Reino Unido. Sin embargo, y a pesar de la bonita estampa que ha protagonizado la familia al completo, hay un detalle que ha llamado especialmente la atención: el aparente relevo por parte de Kate a su tradicional vestido largo.
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Para esta salida tan especial, la Duquesa ha escogido un vestido estampado de largura midi firmado por Alessandra Rich, que rompe con su silueta habitual. El diseño en cuestión es algo más largo que sus elecciones habituales (perfecto para llevar en invierno sin necesidad de llevar medias). Pero además, se ciñe justo debajo del pecho en lugar de en la cintura, como suele ser habitual tanto en sus vestidos como en sus ya tan característicos abrigos-vestido, como bien demostró la pasada semana durante su recorrido en el Royal Train por varias ciudades de Reino Unido.
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Otro de los detalles que llaman la atención es el escote de la prenda, con un cuello redondeado decorado por tres volantes que se alargan hasta los hombros. Un detalle de tendencia que, junto a las mangas abullonadas, suma volumen en la parte superior del cuerpo, reestructurando la silueta y consiguiendo un efecto muy favorecedor para esas mujeres que quieren disimular caderas. El estampado blanco que parece simular copos de nieve u hojas cayendo no hace sino sumar originalidad al look, que seguro se va a convertir en uno de los más aplaudidos de la Duquesa.
