Las flores Liberty, el tie-dye o el estampado animal que recrea la piel de la cebra son tres estampados que están arrasando este verano, pero han tenido que compartir ranking con otro motivo que lleva ya varios meses entre los favoritos: los logos. Esta tendencia, que volvió de la mano del trap, encumbraron las mujeres más influyentes -véase Kylie Jenner como gran ejemplo- y las redes expandieron por todo el mundo, ha llegado a práticamente todas las firmas. Sin embargo, todavía hay quienes no se han lanzado a ella porque no la consideran muy elegante o favorecedora. Si es tu caso, debes conocer la última propuesta de Louis Vuitton, porque te convencerá. Y es que la maison francesa lanza una colección que reinventa los símbolos de la firma en algunas de sus piezas más chic, los bolsos.
Inspirándose los graffitis y en el neo-expresionismo, dos movimientos transgresores nacidos en las calles en los años 80 y que hoy se consideran absolutamente arte, Louis Vuitton ha revisitado un print histórico de sus archivos: el Monogram Giant, un estampado que todo el mundo distingue como propio de esta casa. El resultado son sus icónicos símbolos con una estética más gráfica, perfecta para una nueva generación de consumidoras que adoran las grandes firmas clásicas pero buscan un estilo actual y rompedor.
El nuevo estampado, bautizado como LV Crafty, decora en esta colección tres bolsos atemporales que ya se pueden reservar: el práctico canvas Onthego, la elegante bombonera NéoNéo y la original bandolera circular Boite Chapeu Souple. Está disponible en dos innovadoras combinaciones cromáticas -crema, rojo y negro, o caramelo, crema y negro- y pronto servirá también para reinventar otras piezas de la firma, desde camisetas hasta pañuelos o pulseras, que irán ampliando esta línea. De un modo más sutil, el print se trasladará también a otros modelos de bolsos lady, como el Capuccines, el Crafty Twist o el Pochette Métis -en la primera imagen-, un accesorio que confirma que no hace falta renunciar al estilazo para divertirte con la logomanía.