Su papel como Paloma, la nueva chica Bond de la próxima película de la saga James Bond, ha convertido a Ana de Armas en una de las actrices del momento también fuera de nuestras fronteras. Aunque el estreno de esta nueva cinta, No time to die, se ha retrasado de abril a noviembre (sin fecha concreta en España) debido a la crisis del coronavirus, la actriz promete consolidarse definitivamente en el olimpo hollywoodense gracias a este personaje. En las últimas semanas, además, su nombre ha dado la vuelta al mundo al confirmarse su relación con uno de los pesos pesados de la industria, Ben Affleck, con quien coincidió en el rodaje del thriller Deep Water. Desde que la intérprete publicara una imagen en redes sociales tomada por su nueva pareja, los dos han sido fotografiados en multitud de ocasiones paseando por las calles de Los Angeles. Y en estos paseos bajo el sol, Ana ha desvelado que no solo son sus impecables looks de alfombra roja los que merecen analizarse en detalle.
En pocos días, se ha pasado de no tener ninguna imagen de la pareja, a que estos sean fotografiados por los paparazzi casi de forma diaria. Y en la mayoría de estas instantáneas hay dos detalles que se repiten, desde el punto de vista de la moda. Por un lado, Ana apuesta siempre por el calzado más cómodo del armario con unas zapatillas blancas de Saint Laurent, en concreto el modelo Andy, disponible en la tienda online por 425 euros. Por otro lado, la actriz ha desvelado a golpe de look su otro básico infalible: los vaqueros tipo pitillo. El Street Style ha dejado claro en las últimas temporadas que los tejanos anchos son la tendencia denim más popular entre las expertas del sector, pero la actriz sigue sus propios gustos y apuesta con frecuencia por los jeans ajustados de corte pitillo. En sus últimas apariciones ha lucido en varias ocasiones un diseño de Citizens of Humanity, firma presente también en el vestidor de celebridades como Jennifer Lawrence, Chrissy Teigen o Gigi Hadid. De tiro alto, pernera ajustada y bajo ligeramente por encima del tobillo (un corte perfecto para chicas bajitas), es el modelo Rocket, con efecto lavado que proporciona cierta sensación visual de volumen, el preferido de la actriz.
En su armario no falta tampoco el pitillo negro, un básico fácil de adaptar a cualquier situación, incluso en un look de fiesta. En su caso, el pasado enero pudimos verla combinarlo con uno de los hits de estilo de la temporada: el cárdigan. Una mezcla cómoda y de tendencia que da lugar a estilismos de aire especial pero muy fáciles de llevar. Echando un vistazo a sus últimos looks de calle, es fácil encontrar otras pruebas que confirman su idilio con estos diseños ajustados, perfectos para destacar las curvas. Ya sea con zapatillas o zapato masculino, Ana refleja su estilo relajado apostando siempre por una fórmula de estilo similar que consiste en combinar este básico atemporal con prendas y accesorios más especiales, como una sudadera de terciopelo (hace poco lució un diseño de Sandro) o un bolso tipo capazo, con el que ha sido fotografiada en varias ocasiones.
La evolución de estilo de la intérprete, desde que se diera a conocer en nuestro país gracias a la exitosa serie El Internado hasta la actualidad, es muy llamativa. No obstante, igual que en los armarios de las anónimas del mundo, los vaqueros son un básico infalible en cualquier etapa, tal y como demuestra Ana de Armas con sus últimas elecciones.