Durante las próximas semanas pasaremos todo el tiempo en casa y por ello deberemos adaptar al hogar algunas actividades con las que el aislamiento será mucho más ameno. Por ejemplo, en lugar de entrenar en el gimnasio, se pueden seguir rutinas de ejercicio virtual de todo tipo: yoga, tablas para fortalecer glúteos y piernas, ejercicios para los brazos... En YouTube la oferta es casi ilimitada y es sencillo encontrar la alternativa que mejor encaja con tus necesidades. Aprender a cocinar, disfrutar de ese libro que tenías pendiente o relajarte viendo una película sobre moda son algunos de los planes que las expertas en moda han compartido en sus perfiles sociales. También puedes aprovechar para ir de compras online, eligiendo las prendas clave del armario de primavera o fichando algún diseño de tendencia. Y es que, esta actividad parece que se ha convertido en una de las más populares. Según publicaba El País hace unos días, el incremento de las ventas online no solo se ha producido en el sector de la alimentación ya que firmas como Mango han confirmado un aumento importante de pedidos online, recogía el diario. A la hora de pasearte por las e-shops de tus marcas preferidas, conviene tener en cuenta algunos consejos para ahorrar en tus compras y evitar devoluciones.
1. Cómo acertar con la talla
Para mucha gente, el principal problema de comprar de manera digital tiene que ver con la dificultad de acertar con la talla. No poder probarse la prenda en cuestión hace más complicado elegir con certeza. Por ello, lo mejor es fijarse en la modelo que luce la propuesta, en muchas ocasiones las firmas indican la altura de la maniquí y la talla que lleva, algo que sirve para hacerse una idea de cuál será la talla adecuada para el cliente. Otra manera de evitar devoluciones por este motivo es fijarse, no tanto en la talla, sino en las medidas de la prenda.
2. Mirar las opiniones
Este punto no se puede poner en práctica en todos los casos pero sí en aquellos en los que la tienda online ofrece a los consumidores la posibilidad de escribir una opinión acerca del producto que han adquirido. Así podrás saber si el tejido o el color es en realidad como parece, si la prenda talla grande o pequeño, etc. A veces, bucear por el perfil de Instagram de la marca en cuestión puede dar también pistas.
3. Suscribirse a la Newsletter
Cada vez es más frecuente que las marcas ofrezcan pequeños descuentos en la primera compra (normalmente del 10% o envíos gratis) si los usuarios se suscriben a la newsletter. Algunas firmas que lo hacen en la actualidad son &Other Stories o Rouje, el sello de Jeanne Damas.
© Sézane4. Dejar un artículo en el carrito (durante un tiempo)
Hoy en día, toda la actividad que llevamos a cabo en Internet deja un rastro que las marcas siguen con atención para conocer al detalle nuestros gustos. Un truco muy repetido por las aficionadas a las compras online consiste en, una vez registrada en la tienda, dejar en el carrito de la compra el artículo que queremos durante un tiempo. Alguna firmas animan a sus clientes a terminar la compra si ven que finalmente no se ha llevado a cabo e incluso, en algunos casos, ofrecen pequeños descuentos. Esto suele funcionar sobre todo cuando se visita una web por primera vez, no de manera recurrente.
5. Compartir gastos de envío
Sobre todo en las tiendas de firmas pequeñas, de plataformas de lujo o de marcas que envían desde países lejos de Europa, los gastos de envío pueden ser a veces bastante elevados. Una idea práctica para ahorrar algo en este sentido es compartir gastos con alguna amiga que también haya fichado algo en esa marca en concreto.
6. Atención a las devoluciones
Las devoluciones son el otro gran obstáculo de las compras online. Las grandes marcas asequibles ofrecen un periodo de tiempo razonable para cambiar o devolver una prenda, algo que puede hacerse de la manera más sencilla. En primer lugar, hay que asegurarse que la firma permite la devolución, o al menos el cambio, y que este puede hacerse dentro de un periodo de tiempo amplio y que no supone costes elevados debido a que en algunos casos hay que pagar el envío de la devolución. Siempre es imprescindible, como es obvio, guardar el ticket, dejar la etiqueta y, si puedes, devolverlo en el mismo paquete en el que lo recibiste, aunque en este sentido hay marcas más flexibles.
