A medida que el invierno se va quedando atrás, la paleta cromática neutra se va haciendo a un lado para dejar paso a las prendas de colores vivos. Las últimas Semanas de la Moda internacionales han revelado las fórmulas de estilo que más se repetirán la próxima primavera y, entre ellas, la que más destaca -¡a la vista salta! es la tendencia flúor, una propuesta que ya adelantaron las pasarelas de Nina Ricci, Valentino o 3.1 Phillip Lim, entre otras. Con afán de acaparar todas las miradas y suponiendo un acierto seguro para cualquier tono de piel por su efecto iluminador, los tonos neón se adueñan de prendas y accesorios que prometen elevar cualquier look. Es el turno de subir la intensidad a los colores de tu vestidor, y los siguientes estilismos te enseñan cómo hacerlo.
Con 'animal print'
Las tonalidades neón han llegado al armario de entretiempo para despedirse de convencionalismos y apostar por claves de estilo innovadoras. Aunque es inevitable seguir usando todavía las prendas de abrigo que nos acompañaron durante todo el invierno, como la chaqueta efecto cuero, los vestidos y las faldas en clave midi ya no son grises o de punto, sino rosa fucsia y de efecto satinado. Y, ¿por qué no? Encuentran en el animal print - de cebra o de tigre, en concreto- su mejor aliado para un estilismo rompedor, tanto de día como de noche.
Con 'denim'
Como no podía ser de otra manera, el material más universal de la historia también supone un gran aliado de esta tendencia. El denim, en su versión total look formado por chaqueta, crop top y pantalón baggy de tiro alto, encuentra en unos zapatos amarillo 'chillón' su mejor complemento. Para obtener un aire retro, apuesta por las prendas vaqueras que se adaptan a cualquier estilo y ocasión.
Look de oficina diferentes
Lejos de quedar relegado a los meses de invierno, el clásico tándem formado por vestido midi o largo y blazer se reinventa para sacar su lado más divertido. Estampados florales de colores que combinan con el tono de la americana, como el conjunto de la influencer Leonie Hanne, son una innovadora propuesta para un estilismo que siempre funciona. ¿El detalle final? Lucir unas sandalias también del mismo color.
Elemento diferenciador
La estilista danesa Emili Sindlev, prescriptora de moda por excelencia, apuesta por incorporar el toque llamativo en sus salones de tacón y punta fina. Y es que uno de los puntos fuertes de esta tendencia es que no hace falta aplicarla a lo grande, basta con un detalle como unos zapatos para darle un giro de 180 grados al conjunto.
Flúor y pastel
¿Eres de las que se rige por la filosofía del 'todo o nada'? Entonces esta es tu fórmula de estilo idónea para lucir los colores flúor. Es muy simple, se trata de emparejar tus piezas más llamativas, como un vestido midi en fucsia o en verde, con chaquetas o abrigos y complementos en tonos pastel. Aunque a priori parezca una combinación imposible, el resultado es un acierto seguro por su capacidad de imprimirle luz a tu rostro, sin importar tu color de piel o de cabello.
De invitada
A medida que se acerca el buen tiempo, los colores en su versión más intensa se cuelan también en los atuendos de estilo formal. Un vestido de invitada en un tono verde flúor, como este de la influencer alemana Caro Daur, es el perfecto reflejo del espíritu refrescante del verano. Además de no resultar recargante, el beneficio añadido de una pieza así es que no necesita joyas o accesorios complicados, ya que el color acapara todo el protagonismo del look.
Misma gama cromática
Otra de las ventajas de los tonos flúor es que casan a la perfección con los que comparten su misma paleta cromática pero sin contar con la misma intensidad. Prueba de ello es esta propuesta de la insider escandinava Jeanette Madsen, un estilismo formado por una blazer que hace la función de top, unos pantalones fluídos de tiro alto y un bolso de mano. ¿El denominador común? Todas las piezas, de color berenjena, rosa y fucsia, se mueven en el rango cálido del rosa.
Con estampados clásicos
No hace falta recurrir a fórmulas elaboradas para hacer que una tonalidad neón funcione. Si se trata de un top o un suéter ajustado de cuello alto, brillará con luz propia si se empareja con un abrigo o una americana de cuadros en tonos básicos como la gama de marrones. ¿El resultado? Un look perfecto para los estilismos diarios que ya hace un sútil guiño a la primavera.
Complementos coordinados
A medio camino entre la discreción y el afán por acaparar todas las miradas, está la opción de implementar la nota neón en clave matching en los complementos. Un minibolso de mano, que hace más de elemento decorativo que funcional, y unos salones de tacón bajo y diseño minimalista conforman los sutiles, pero efectivos, detalles que alegran cualquier estilismo de códigos clásicos.
Toque de color
Para las que no se quieren despedir del eterno total look en negro ni en primavera, existe una fácil solución: concentrar la nota de color en un único elemento. Si el conjunto enteramente negro es garantía de un efecto visualmente favorecedor, por su capacidad para estilizar la figura, un complemento flúor, como por ejemplo un bolso en clave bandolera, tendrá el poder de aportar la vivacidad justa que necesita el atuendo.