¿Quién dijo que ir a una boda impedía enseñar piernas, escote... o ambas? Puede que los vestidos de invitada más demandados tengan largo midi, tal y como nos contaban los diseñadores españoles hace unos días, pero hay muchas chicas que no quieren renunciar a vestir sexy en ese tipo de fiestas. Para las que lo tienen claro, y para las que dudan, seleccionamos algunos diseños con los que te sentirás la más atractiva de la celebración y seguirás estando muy elegante.
Minivestido con mangas 'puffy'
Las mangas abullonadas, un detalle inspirado en la estética ochentera, llevan algunos meses siendo tendencia. Pero, además, son la excusa perfecta para elegir un vestido muy corto, porque captan la atención y la largura mini pasa a un segundo plano. Como extra, afinan la cintura y equilibran la cadera. ¿Necesitas más razones para atreverte con ellas?
Vestido de jacquard de organza con escoote en 'V', mangas abullonadas y lazada frontal. Es de For Love & Lemons (256 euros).
Con volantes
Otro truco cuando llevas minivestido, para no perder sofisticación, es optar por diseños con volantes en la zona superior. Estos actuarán igual que las mangas puffy, captando la atención sobre esa parte del cuerpo. Si también quieres llevar los hombros descubiertos, como Chiara Ferragni, elige una silueta menos ceñida y más romántica y tendrás un look de boda perfecto.
Minivestido estampado de popelín con escote cuadrado y volantes en los hombros, de Zara (29,95 euros).
Escotazo... en la espalda
Las invitadas más sexies y elegantes llevan escote, sí, pero en la espalda. Puedes elegirlo tan amplio como te parezca, siempre que la zona delantera o el largo lo compense. Los diseños de esta temporada apuestan por tiras cruzadas para cerrarlos, como en la image, aunque hay clásicos -como las formas en 'V' o las aberturas redondeadas- que nunca pasan de moda. ¿El beneficio añadido? Apenas necesitarás complementos porque, con recogerte el pelo, tu espalda será la gran protagonista.
Vestido largo con escote en la espalda confeccionado en viscosa que proviene de bosques gestionados de forma sostenible. Es de Ba&sh (320 euros).
La versión más 'sexy' de un esmoquin
Si lo que quieres es un escotazo tradicional, prueba la tendencia del dos piezas de chaqueta y pantalón. Gabrielle Caunesil lo defiende como pocas y consigue un look muy elegante a pesar de no llevar blusa. Si no te sientes tan atrevida como la modelo, añade un cuerpo corto que, además, te permitirá cambiar de look: traje de día, top y pantalón de noche.
Blazer con doble botonadura (49,99 euros) y pantalón con pinzas (29,99 euros), de Mango.
El eterno 'slip dress'
Que regrese una y otra vez al corazón de las tendencias confirma que el vestido lencero es siempre una apuesta segura. Las versiones son casi infinitas, solo debe cumplir dos requisitos: tener una silueta minimal y estar confeccionado en un tejido ligero que evoque la seda. Los diseños con tirantes finos, escote fluido y abertura lateral, como el slip dress de Bruna Marquezine, son perfectos para una boda de noche.
Slip dress de color rojo con tirantes finos, escote en forma de corazón y corte ceñido, de Haider Ackermann (rebajado a 547 euros en Farfetch).