Solo han hecho falta unas pocas horas para que Irina Shayk y Chiara Ferragni vuelvan a protagonizar otro duelo de estilo sin quererlo. Si hace unos días la modelo lucía el mismo trench que la empresaria italiana, una gabardina amarilla con cinturón, ahora otra prenda de abrigo es de nuevo la pieza estrella de sus look. De tacto suave, oversize, solapas anchas y silueta cocoon, así es el diseño que ha unido a ambas nuevo. Pero sin duda alguna, lo más llamativo de la pieza es su color: azul turquesa, una tonalidad que nunca pasa desapercibida aunque se combine con lo más básico y sencillo del armario. Y es que, si ya de por sí la estética teddy es una de las tendencias más demandadas de la temporada por su poder ante las bajas temperaturas, ahora su éxito se multiplica al ser lucida por dos de los iconos de estilo más seguidos del momento.
El inesperado look de Irina Shayk
Sin embargo, pese a que ambas llevan la misma prenda, la manera de combinarla es muy distinta. Irina es la que más ha sorprendido, ya que el estilo de la modelo se caracteriza por la sobriedad y el minimalismo y, en esta ocasión, ese punto clásico no ha aparecido. Con un conjunto de dos piezas estampado en blanco y negro, un jersey básico negro de cuello alto y unas botas militares de Tony Bianco ha conjuntado la rusa su llamativo abrigo de Max Mara. Un estilismo más arriesgado de lo normal con el que no es muy habitual ver a la maniquí, siendo la gorra y el bolso de asa corta los dos complementos que han hecho que el conjunto navegue entre la estética deportiva y la sofisticada.
Chiara Ferragni y el 'total look black'
De Nueva York a Milán, este abrigo ha expandido su éxito a nivel mundial y también ha caído en manos de Chiara Ferragni. La influencer, fiel a su estilo elegante pero siempre con un toque cañero, ha preferido combinar esta prenda con un total look black, compuesto por una camiseta, unos shorts 'efecto piel', unas medias con estampado romántico de Calzedonia -aprovechando que se acerca San Valentín- y unos botines con hebillas. Las gafas de sol, junto con el abrigo, han sido las únicas piezas que se han salido de la gama cromática neutra. Dos ejemplos de estilo con los que aprendemos cómo puede cambiar una misma prenda en función de los elementos con los que se conjunte.