Aunque todavía queden algunas semanas de frío, la primavera está cada vez más cerca, y las algunas de las tendencias que triunfarán la próxima temporada ya están comenzando a florecer en el asfalto, convirtiéndose en el objeto de deseo de modelos, celebrities y expertas en moda. Una época que tiñe a las prendas de colores vivos, alegres y cálidos. Y si hay alguien que sabe adelantarse a las corrientes estilísticas, esa es Victoria Beckham, quien se ha convertido en uno de los iconos de estilo más seguidos del momento. Su elegancia y minimalismo con un toque atrevido es una fuente de inspiración para millones de personas. Entre ellas, la modelo Nieves Álvarez la última prueba que demuestra que la diseñadora es todo un referente en cuanto a moda se refiere.
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Las combinación de tonalidades es uno de los juegos más utilizados por las firmas y esta temporada ya han dictado tendencia: el verde y el amarillo se fusionan. Una tendencia con la que Nieves Álvarez ha dado la bienvenida a la primera, apostando por un total look de Pertegaz, compuesto por un pantalón de talle alto -una de las prendas 'fetiche' de la presentadora- con un cinturón, que da un toque femenino y endulza la prenda, y un top de punto de rayas bicolor, con la logomanía de la marca española en el cuello alto. Como broche de oro y siguiendo la línea cromática, la modelo ha completado el estilismo con unas sandalias de tiras y unos aros XL, ambos complementos en tonalidades amarillas.
Pero si hoy hemos visto a la presentadora apostar por esta tendencia, hace unos días veíamos a Victoria Beckham paseando por las calles parisinas con un look muy similar de inspiración working: un jersey amarillo de punto y cuello alto, un pantalón verde acampanado de pana y cintura alta -que ayudaba a alargar visiblemente sus piernas y estilizaban su cuerpo-, ambas prendas de su firma, un abrigo de paño con estampado de cuadros, unos botines negros 'efecto cuero' de Alaia y un bolso de cocodrilo de Hermés. Y es que, la diseñadora es una de esas mujeres que, aunque arriesgue y luzca varias tendencias en un mismo look, siempre acierta con su elección. Por ello, el fusionar el verde y el amarillo es un juego con el que no todo el mundo saldría ganando, sin embargo, la empresaria no solo ha salido triunfadora, sino que ha expandido su popularidad hasta llegar a los ojos de las firmas españolas.