Vestido blanco y botas 'cowboy': la apuesta de Gigi Hadid para triunfar en sus eventos de noche

El color blanco siempre es uno de los tonos estrella del verano, pero este año su éxito ha sido tal que ha conseguido sobrevivir a la llegada del otoño y promete seguir protagonizando looks a lo largo de todo invierno. Reticentes a renunciar a él, las expertas en moda han encontrado los trucos para seguir llevando pantalones blancos durante los meses de frío, los total looks en este color han desbancado a los tonos oscuros gracias al efecto 'buena cara' que consiguen y los jerséis blancos en tejidos cálidos y suaves se han convertido en la prenda clave para vestir bien en otoño. Pero ahora, Gigi Hadid ha ido un paso más allá al convertir el vestido blanco en la prenda ideal para crear el estilismo de noche perfecto para la época invernal. 

La modelo asistió anoche a la gala de los Premios de la Asociación de la Música Country (CMA), en Nashville. Para la ocasión, escogió un vestido plisado de corte tubo, sin mangas y con cuello alto, en un tejido blanco iridiscente. El diseño, firmado por Helmut Lang, destacaba las impresionantes curvas de la top ajustándose a su cuerpo como una segunda piel y las ligeras transparencias del tejido dejaban entrever su ropa interior, en el mismo tono. Para competar el look, Gigi escogió varias joyas doradas, uno de los trucos infalibles para conseguir que incluso la ropa más asequible parezca de lujo, y unas botas altas de tacón ancho y estilo cowboy en el mismo color que el vestido. 

Los detalles iridiscentes del vestido, reforzados a través de los brillantes de las joyas y su maquillaje con sombras doradas, ojos marcados y toques de iluminador, añadían el extra de glamour que exigen los eventos nocturnos. El detalle de las botas, sin embargo, rebajaba la seriedad del look, así como su peinado natural con el cabello suelto y ondulado con raya ladeada. Una fórmula de estilo a la que Gigi ya había recurrido recientemente, en la gala de los Premios CFDA, con un vestido de punto verde con falda plisada de Dion Lee y botines marrones de estilo cowboy. 

En este caso, la diferencia la marcaba el color blanco que, junto con los complementos dorados conseguía crear ese efecto impoluto de sencillez y elegancia que solo este tono es capaz de evocar. Una opción a la que podrás recurrir en tus estilismos de noche más especiales con botas o sandalias de tacón e incluso para crear conjuntos monocolor más informales con prendas de punto y abrigos de paño. El blanco, en definitiva, ha llegado para quedarse.