Las semanas previas al verano están siendo más intensas que nunca para Chiara Ferragni. La italiana está viajando por todo el mundo para promocionar el lanzamiento de la colección cápsula de maquillaje que ha creado en colaboración con Lancôme. Aunque tiene fijada su residencia en Milán, donde vive junto a su marido Fedez y su hijo Leo, también pasa mucho tiempo en Los Ángeles, donde está planificando comprarse también una residencia, tal y como ha comentado a sus seguidores. En la ciudad californiana ha tenido lugar precisamente su última aparición pública. Aprovechando su estancia allí, Chiara ha acudido a un evento de Max Mara celebrado en el Chateau Marmont de Los Ángeles y para la ocasión ha escogido un sencillo mono perfecto para los días de verano.
Dejando a un lado las tonalidades neón que últimamente incorpora con frecuencia en su vestuario de día a día, Chiara ha elegido un mono fluido en rosa empolvado que se ciñe a la cintura sutilmente. La parte superior cuenta con varios detalles, como los hombros en pico y el escote cruzado rematado por dos solapas satinadas que se asemejan a una americana. De hecho, esta propuesta podría definirse como un híbrido entre el traje de verano y los monos oversize, ya que incorpora elementos de ambas tendencias y convierte el modelo en una apuesta diferente pero fácil de llevar. La zona del pantalón es ancha y ligeramente acampanada en el bajo, una opción idónea para los días de verano donde los diseños amplios resultan perfectos para hacer frente a las altas temperaturas.
Esta elección de aire minimalista se distancia de las opciones que normalmente Chiara lleva en la alfombra rojas, donde su gusto por las tendencias siempre queda patente. Manteniendo la estética sencilla del estilismo, apenas ha recurrido a complementos más allá de la gargantilla brillante que adorna su cuello y que proporciona luz al rostro y los diferentes anillos y brazaletes que se pueden ver en su muñeca y manos. Como calzado, unas sandalias de tacón con tiras finas. Respecto al look de belleza, si hace unas semanas sorprendía en el festival de Cannes con un corte bob que resultó ser una peluca, esta vez ha elegido el efecto contrario y ha aumentado la longitud de su melena con unas extensiones de acabado ultra liso. Un peinado sencillo que contrasta con el elaborado maquillaje de ojos: mirada delineada en negro intenso y sombras de efecto ahumado en tonos tierra para el párpado superior. En definitiva, ha dado con un conjunto que podría funcionar en un look de trabajo, en un evento de noche añadiendo complementos de tendencia o incluso en una celebración que implique un dress code más elaborado como un bautizo o una comunión.