Sucedió en el MET hace 23 años: la princesa Diana y su polémico vestido

Cada edición la expectación que genera la Gala Met es mayor y la lista de invitadas que asisten al evento más influyente de la industria de la moda cada vez más exclusiva. El primer lunes de mayo -fecha en la que se celebra desde hace catorce años- actrices, modelos, cantantes, diseñadores... demuestran su lado más creativo para ceñirse al código de vestuario de cada año. En 2019 la temática Camp: Notes on Fashion será la que marque las elecciones de vestuario de los asistentes, muchos de los cuales se han dejado ver en las prefiestas celebradas durante los días previos a la gran cita con la moda. Un término desconocido para el gran público y que tiene que ver con "el amor por lo antinatural: el artificio y la exageración... el estilo a expensas del contenido... el triunfo del estilo epiceno", tal y como explicó Andrew Bolton -principal conservador del MET- en el comunicado que la institución dio a conocer hace unos meses. Teniendo en cuenta estas palabras se espera que en esta edición los vestuarios sean más llamativos que nunca. Repasando la lista de looks que han desfilado por esta alfombra roja, el que Diana de Gales llevó en la Gala Met de 1996 se cuela en los primeros puestos de los más icónicos y, lejos de reflejar exageración como se pretende este año, se trata de una propuesta de líneas minimalistas que, no obstante, fue una de las elecciones de vestuario menos convencionales de la Princesa. 

En el año 1996 Diana de Gales y el Príncipe Carlos firmaban su divorcio pocos días antes del que sería su 15º aniversario de boda, el 29 de julio. Unos meses después, a comienzos de diciembre de ese mismo año, la Princesa Diana hacía su aparición en solitario en la Gala Met en Nueva York vestida con un diseño histórico que poco tenía que ver con sus estilismos habituales. Aquel vestido azul marino de seda con escote con detalles lenceros fue la primera creación de John Galliano para Dior, firma que capitaneó hasta 2011. Un diseño que encajaría a la perfección en cualquier alfombra roja de la actualidad y con el que Diana dio el pistoletazo de salida a la prolífica carrera del modisto al frente de la legendaria firma francesa, que en 1996 celebraba el 50º aniversario de su fundación. Las joyas de zafiros que escogió para completar el look -unos pendientes y su conocida gargantilla de perlas y zafiro- iban en consonancia con la tonalidad azul noche de la pieza. En la imagen inferior, Diana de Gales junto a John Galliano y la editora de moda Liz Tilberis.

Cualquier amante de la moda y las tendencias se habrá fijado en el bolso de mano con el que Diana terminó de culminar este conjunto. Se trata de una creación de Dior, en concreto el Minibolso Lady Dior, una versión de tamaño reducido que la madre del Príncipe Guillermo y el Príncipe Harry también llevó en otros colores y tamaños. De hecho, un año antes la maison había regalado a la Princesa un bolso similar (un diseño reeditado) que se convirtió en un auténtico éxito desde que ella apareció con el complemento colgado del brazo. Por ello Dior bautizó al diseño como Lady Dior, una opción que sigue vigente en la actualidad y que, gracias al auge de los bolsos mini, se ha convertido en un hit de estilo entre las prescriptoras de estilo más influyentes del momento. Cuando se cumplen 23 años del look, Diana de Gales sigue siendo un icono de estilo irremplazable y muchas de las tendencias que llevaba en la década de los noventa (por ejemplo este slip dress de encaje) se han colado en el armario de las mejor vestidas.