Por qué la tendencia 'tomboy' sigue triunfando en el armario femenino

El doble denim, un total look de cuero, la mezcla infinita de estampados o el Pink power son solo algunas de las tendencias que el Street Style ha anticipado que llevaremos durante los próximos meses. Prendas en las que invertir durante las rebajas o que conseguir entre las propuestas de nueva temporada. Sin embargo, si algo están dejando claro las más estilosas durante las Semanas de la Moda Masculina, es que la estética masculina, caracterizada por cortes oversize, americanas de cuadros o trajes, sigue siendo una de las preferidas.

Traje de chaqueta

Desde que Yves Saint Laurent revolucionó, en 1966, el armario femenino al introducir el traje de chaqueta, esta prenda se ha convertido en uno de esos básicos que nunca fallan. Aunque a lo largo de los últimos años ha sufrido una evolución sin precedentes -se ha teñido de colores vivos, ajustado a la silueta femenina, coqueteado con estampados…- la diseñadora Victoria Beckham suele defender diseños minimalistas de colores lisos.

Gabardina

Otra de las prendas que popularizó el diseñador francés -aunque tampoco la inventó él- fue la gabardina. Saint Laurent subió por primera vez esta prenda a la pasarela en 1962, en su colección de otoño-invierno. Popularizó de este modo entre las mujeres un diseño que había estado reservado a los hombres desde su creación, a finales del siglo XIX, y que tuvo un papel protagonista durante la I Guerra Mundial.

Cazadora de cuero

Aunque fueron los pilotos británicos los que dieron visibilidad esta prenda durante la II Guerra Mundial, no tardaron demasiado en popularizarse. Así, en los años cincuenta se convirtieron en un signo de rebeldía y juventud, en los sesenta se convirtieron en la prenda que mejor complementaba a las mini faldas y, en los ochenta, en la seña de identidad del movimiento punk. Ahora la prenda se ha convertido en un básico de cualquier experta en moda, pero las más estilosas apuestan por modelos vintage y en clave masculina.

Blazer

Puede ser o no cruzada, tener botones metálicos o diseños más comunes. La blazer nació como una prenda pensada para utilizar en clubes náuticos, pero el paso de los años la ha colado en todos los armarios, también en el femenino. Esta chaqueta se ha reinventado en infinidad de tejidos, colores y patrones. Aunque los diseños de terciopelo o combinados con el pantalón gustan, los modelos más clásicos, con colores tierra o estampado de cuadros siguen siendo los preferidos.

Blazer

Aunque son cada vez más las influencers que recurren a ceñir este tipo de chaqueta con un cinturón -un truco de estilista para afinar y estilizar la silueta-, lo cierto es que los modelos oversize, que simulan ser dos o tres tallas más a la que se utiliza habitualmente, siguen teniendo su espacio reservado en el Street Style. Para lograr un look aún más masculino, basta con combinarla con camisas lisas o pantalones tipo traje.

Blazer

El Street Style de las semanas de la moda masculina ha demostrado que esta prenda se suma, además, a la tendencia del layering. La americana no se luce solo bajo abrigos o gabardinas, también junto a otras blazers con un corte más amplio. Para lograr un estilismo perfecto apuesta por diseños estampados para el exterior y lisos para el interior.

Frac

Hay quien va un paso más allá y opta por incluir en su guardarropa prendas que, hasta ahora, estaban reservadas al protocolo masculino. Un ejemplo es el frac, elegido por una de las invitadas a los desfiles, una apuesta cómoda y elegante que pronto podría formar parte de tu fondo de armario. Una prenda por la que también apostó Cara Delevingne en la boda de Eugenia de York, a la que le pidió permiso para saltarse el protocolo.

Pantalón de pinzas

Aunque los vaqueros y los diseños ajustados han reinado en el armario masculino en las últimas temporadas, el pantalón con pinzas o tailored fit, se convierte en uno de los modelos preferidos del nuevo estilo masculino. Este diseño clásico, pero adaptado a los nuevos tiempos, se cuela también entre los looks femeninos. Lo mejor es que son muy fáciles de llevar -combinan con jerséis, americanas, camisas o blusas- y también se caracterizan por su comodidad.

Camisa de cuadros

Una de las formas más sencillas de dar un toque masculino a un estilismo que, en principio, sería totalmente femenino -un vestido- pasa por elegir como abrigo una prenda del armario de tu chico. Una camisa de cuadros, de corte oversize, puede transformar tu look en cuestión de segundos y ayudarte a conseguir ese objetivo.