El fin de semana pasado tuvieron lugar en Londres una serie de actos conmemorativos en honor a los caídos en la Primera Guerra Mundial. La Familia Real británica se reunía el sábado casi al completo con motivo del Día del Recuerdo y el Centenario del Armisticio de 1918, y Meghan Markle, que acudió a esta solemne cita por primera vez, demostró de nuevo su maestría para compaginar su estilo propio con el estricto protocolo británico gracias a un sobrio look con el que se mantuvo fiel a su esencia. La duquesa de Sussex vistió de negro de pies a cabeza para demostrar respeto a los que cayeron en combate, tal y como hicieron las demás mujeres de la familia, como la duquesa de Cambridge o la propia reina Isabel II.
© Getty ImagesA su llegada al Royal Albert Hall, donde acudió a un concierto organizado a modo de tributo por la Royal British Legion, Meghan mostró tan solo una parte de su estilismo, y ya entonces pudimos intuir que se trataba de un conjunto sencillo pero sofisticado, muy apropiado para la ocasión. Parecía que la esposa del príncipe Harry optaba por esconder su tripita premamá mediante un abrigo tipo batín -uno de sus cortes fetiche- de Stella McCartney, pero posteriormente pudimos comprobar que el diseño que llevaba bajo él conseguía el efecto contrarío, ya que precisamente potenciaba sus nuevas curvas. Esta prenda, confeccionada por la artífice del segundo vestido de novia de la Duquesa, contaba con una estructura masculina pero añadía un gran lazo de raso en la parte frontal para entallar la cintura. Completó el look con cartera de mano de la misma diseñadora y salones de Manolo Blahnik.
© Getty ImagesHasta ahora no habíamos podido comprobar qué llevaba la duquesa de Sussex bajo esa estilosa pieza, pero por fin se ha descubierto el secreto del que ha sido uno de sus looks más misteriosos. Meghan ha optado de nuevo por marcar su barriguita gracias a un LBD entallado que, además, es bastante más barato de lo que podíamos esperar. El modelo en cuestión se trata de un diseño de silueta lápiz con escote en 'V' cruzado y falda de tubo por encima de las rodillas obra de la casa británica Marks & Spencer.
© Marks&SpencerNo es la primera vez que la Duquesa recurre a esta firma, ya que a principios de año estrenó un jersey de punto fino azul marino de esta casa que generó cientos de titulares por su precio, que no superaba las 45 libras (unos 51 euros aproximadamente). Esta vez se ha superado a sí misma y ha llevado un diseño muy asequible a uno de los teatros más emblemáticos del mundo, demostrando que la moda low cost puede ser igualmente elegante. Su vestido todavía se encuentra a la venta en la web de la marca por 49 libras (55,38 euros aproximadamente) y, de momento, está disponible en casi todas las tallas, aunque la propia página lo advierte: "¡Date prisa, pocas unidades en stock!". Si lo prefieres, puedes hacerte con él en su versión en rojo, aunque está a punto de agotarse.
