Guía de estilo: cómo vestirte en verano si no estás bronceada

Protegerse la piel del sol durante el verano es una prioridad que todos tenemos en mente con mayor o menor preocupación. A día de hoy existen multitud de solares pensados para cada tipo de tez (grasas con tendencia acnéica, con propensión a las manchas, sensibles...) pero aún así es posible que tomar el sol no sea tu pasatiempo favorito y prefieras invertir tus horas en la playa o la piscina bajo la sombra de un árbol o una sombrilla. O quizá tu piel sin broncear te guste más que el aspecto moreno que toma tu dermis después de varias horas bajo el sobre la toalla. Si tienes la piel blanca es posible que, entre el aluvión de imágenes con chicas en traje de baño luciendo no solo cuerpo, sino bronceado, te haya costado dar con la inspiración para tus estilismos de este verano. Para encontrarlo, las prescriptoras de estilo escandinavas, inglesas, francesas, españolas... que no se broncean demasiado nos dan las claves de los colores y prendas que mejor sientan.  

Color arena

Dentro de que tu piel sea pálida, hay muchos otros aspectos que deben ser tenidos en consideración para dar con la tonalidad perfecta a la hora de vestirnos. Las propuestas de colores poco intensos como el neutro beige arena que luce Lucy Williams en uno de los bikinis que ha creado en colaboración con Love Stories sientan bien a las pieles más blanquitas ya que no crean un contraste cromático demasiado evidente. Además, a las chicas de cabello castaño claro, rubio o con reflejos luminosos estos colores también les suman puntos ya que mantienen la naturalidad del conjunto, que se mueve entre los mismos matices de color. 

Color arena

La alemana Caroline Daur también sabe cómo sacar partido a su piel rosada y recurre además hay un truco de estilo muy efectivo para aumentar el brillo natural del rostro (que no el bronceado) con un solo gesto: completar el conjunto con joyas metalizadas - en su caso pendientes y collares superpuestos - que favorecen tanto como un maquillaje iluminador gracias a los reflejos que producen.

Estampados

Louise Follain repite estrategia con este estilismo idóneo para todas aquellas que vivan o veraneen en el norte. Pantalon en beige y superposición de medallones que iluminan el escote formado por la camisa semiabierta que luce. El estampado de esta prenda rompe con la sobriedad del conjunto pero de nuevo predominan los tonos pastel (amarillo o naranja), junto con el azul marino esta vez, en este diseño de la firma neoyorquina Rachel Comey.  

Amarillo sí, pero pastel

Un truco de moda de sobra conocido consiste en recurrir a colores muy llamativos e incluso de efecto neón para potenciar nuestro bronceado aprovechando el efecto visual que provocan en constraste con nuestra piel. Para las personas más pálidas, el amarillo, el rojo o naranja también son buenas opciones a tener en cuenta aunque siempre eligiendo sus versiones pastel, más apagadas pero muy románticas y femeninas. 

Colores pastel

A pesar de haber pasado su comienzo de verano en la isla de Formentera, la británica Alexa Chung no suele broncearse de manera visible. Como mucho, su rostro adquiere un cariz dorado salpicado de pecas en la zona de la nariz y las mejillas. En sus looks de día, los colores claros forman parte habitual de su armario, como nos confirma con este look que eligió para ir a ver un partido de Wimbledon, al que acudió con un vestido midi blanco y una chaqueta de manga corta de color malva firmada por Ralph Lauren. Los estampados son otros de sus grandes aliados, aunque casi siempre en colore oscuros (verde bosque, gris, azul marino...)

¿Y si no es pastel?

Aunque basta con echar un vistazo a los looks de las influyentes de Instagram para comprobar que los tonos pastel son los preferidos para quienes no se broncean la piel, éstos no son la única opción. Si no te quieres limitar, las alternativas más repetidas son los colores neutros que, sin tener el aire apagado de los pastel, no adquieren el efecto brillante de sus versiones más intensas. El verde hierba (como el de este vestido de print floral de Free People que lleva la diseñadora de joyas e influencer Lucía Cuesta), el azul piscina o el mostaza son, junto con el blanco, las opciones más vistas. 

Denim en vestido...

Aunque los vaqueros son demasiado cálidos para el verano en la ciudad, hay muchas otras propuestas más allá del denim y nuevas formas de llevarlo adaptadas a esta temporada. Los vestidos vaqueros, como casi cualquier prenda fabricada con este tejido, sientan bien a todo el mundo (siempre y cuando se escoja el modelo que más favorece a nuestra silueta) y en el caso de las chicas con la piel más blanca, los diseños de efecto lavado son la mejor idea. 

... y pantalones

Si prefieres el denim tradicional, oscuro y liso siempre puedes combinarlo con prendas más claras como hace la danesa Pernille Teisbaek (acostumbrada al suave verano en Copenaghue), optando por camiseta, zapatos y gafas de sol en color blanco. 

Y en cuanto al pelo...

De igual forma que los complementos de efecto metalizado o los maxi pendientes dorados o con detalles de cristal y color pueden proporcionarnos un efecto 'buena cara' sin necesidad de recurrir a ninguna base de maquillaje, el color de nuestro pelo también influye en el aspecto de nuestro rostro. La tendencia bronzing hair, que logra un efecto dorado-bronceado en el cabello trabajando el contraste de los matices de color más intensos y cálidos, pueden suavizar las pieles más pálidas aportando toques de luz, especialmente si enmarcamos nuestro rostro con algunos mechones más claros que el resto, como apuesta la instagramer parisina Lena Simonne.