Looks de invitada con los que prolongar el bronceado más allá del verano

Si en los meses de primavera el número de invitaciones a bodas que habías recibido crecía considerablemente, con el fin del verano, es más que probable que se hayan multiplicado. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, julio y septiembre son los preferidos por los españoles para celebrar sus enlaces. Lo único malo de los que eligen su fecha al final de la estación calurosa es que es muy probable que el bronceado que has conseguido durante tus días en la playa o piscina haya comenzado a desaparecer. Pero eso no debería frenarte. Hay colores que te harán parecer más bronceada y estampados que te favorecerán sin necesidad de haber tomado el sol.

Ocres sí, pero combinados

Todas las variaciones de los amarillos y los dorados son, según la psicología del color, sinónimo de felicidad, un motivo suficiente para incluirlo en tus looks de invitada. Sin embargo, aunque estos colores casi siempre han estado reservados a las pieles bronceadas, también puedes utilizarlos si aún no has tomado el sol. Eso sí, es preferibles que elijas uno oscuro -mejor ocre- y que lo combines con prendas de diferentes tonalidades, como agua o azules que favorecen a casi todas.

El tono que más favorece

Según la ciencia, el rojo es el color que más atractivas nos hace. Además, según varios estudios sobre colorimetría, es el tono que más favorece a todo tipo de pieles, sin importar su tonalidad. Tal vez por eso se ha convertido en uno de los comodines de mujeres que, como Olivia Palermo, Bella Hadid o Caroline Daur, lo eligen siempre que pueden.  

Tonos diferentes

Las prendas confeccionadas con tejidos vaporosos suelen ser las preferidas para las bodas de verano: son ligeras, elegantes y no necesitan incorporar un número demasiado elevado de complementos. Puedes elegirlos en tonalidades vivas o, si tienes la piel clara, como Chiara Ferragni, optar por tonos oliva. Además de favorecerte, seguro que no coinciden con ninguna otra invitada.

Azules, en toda su gama

Si tu piel tiene ligeros matices dorados, pero no estás bronceada todavía -no como María F. Rubíes que puede presumir de un bonito moreno-, los azules pueden convertirse en una de tus elecciones más acertadas. Según explica la colorimetría, las personas con este tipo de pieles resultan más bellas cuando apuestan por prendas en tonalidades frías que van desde los azules hasta los plata o grises. Lo mejor es que también puedes seguir utilizándolos si tu tono sube unos cuantos puntos.

O combinados con fucsias

Los rosas fuertes y los anaranjados suelen sentar de maravilla a chicas que tienen la piel muy bronceada, sin embargo, combinado con otras tonalidades como los azules -que favorecen a casi todas- pueden ser también una buena opción. Lo mejor es elegirlo como tono protagonista de los complementos y que en las prendas tengan un espacio limitado.

Mezcla de opuestos

Los rosas, los nude y el negro siempre son tonos complicados de utilizar si no estás muy morena. Con este último corres el riesgo de que tu piel se vea más pálida y, con los dos primeros, que se mimeticen con tu noto. Si no quieres renunciar a ellos porque te gusta como te sientan, lo mejor es que los combines entre ellos y apuestes por prendas que utilicen ese colorido. De ese modo lograrás equilibrar el efecto de ambos.

Negro sí, pero con otros colores

Aunque en verano muchas chicas suelen preferir los tonos alegres y llamativos para sus looks de invitadas, el negro siempre es una buena opción, pero como ya te comentábamos, puede hacer que tu piel, si no estás bronceada, parezca aún más pálida. Si aún así quieres llevarlo opta por elegirlo como fondo de tus prendas, pero es preferible que esté salpicado por un estampado alegre. También que lo completes con accesorios en tonos vivos como rojos o anaranjados.

El crema, mejor para el fondo

Los tonos claros no están prohibidos, aunque tu piel también lo sean, es más, los tonos crema pueden resultar muy favorecedores si los eliges como color de fondo de unas prendas salpicadas con estampados alegres. Las flores siempre son una buena opción para estos casos (admiten casi todos los colores, y suelen aportar por los más llamativos), pero los lunares tampoco son descartables.