Todo lo que debes saber antes de comprar un bolso 'vintage'
Más rentable que el oro, más seguro que los ‘bitcoins’. Si vas a invertir en tu armario, que sea así
En moda, a menudo se emplea la palabra inversión para aquellas prendas en las que merece la pena gastarse un poco más con el fin de conservarlas durante más tiempo. Un jersey de cachemira o unos buenos vaqueros, por ejemplo. Sin embargo, cuando hablamos de bolsos, la palabra inversión cobra un nuevo significado puesto que un modelo vintage puede resultar un valor más rentable que el oro y más seguro que los bitcoins. Es decir, cómpralo ahora y lo agradecerás siempre: mañana cuando lo estrenes, dentro de 10 años cuando compruebes su valor y en 40 años llegado el momento de legarlo a una nueva generación.
En términos estrictamente financieros, un Birkin de Hermès tiene un retorno de inversión muy superior al del oro y mucho más estable si comparamos las fluctuaciones que caracterizan al metal precioso con la media constante y creciente del diseño estrella de la casa francesa. Así lo confirmó un estudio de Baghunter de 2016 que, no sólo ratificó sus conclusiones en 2017, sino que la actualización de su informe, arrojó cifras aún más optimistas para los propietarios de uno de estos bolsos.
Por eso, no nos debe extrañar que portales como Vestiaire Collective tengan a la venta bolsos de segunda mano más caros que algunas de las nuevas ediciones que están disponibles en las tiendas de lujo. Y es que algunos modelos antiguos poseen más valor que otros más recientes, no tienen lista de espera pero, sobre todo, la mayoría suele ser más asequible. En el extremo opuesto, algunos inconvenientes como la dificultad para encontrar uno en buen estado, la desconfianza hacia las imitaciones y la amplísima variedad del mercado. ¿Y si te decimos que hay una solución para todo?
Dónde comprar un bolso vintage
Lo primero que aconsejan los expertos es acudir a lugares de confianza para evitar imitaciones o cualquier estafa con el precio. Esto obliga a rechazar de plano los mercadillos y pequeñas tiendas de las que no tengamos referencias o mejor, reservar estas direcciones para pequeñas gangas que no supongan un gran desembolso. Para hacerte con un Chanel o un Hermès lo mejor es recurrir a lugares especializados como Vestiaire Collective dónde el Flap bag clásico puede oscilar entre los 1.000 y los 3.5000 euros. De la misma forma, Rebelle, líder del sector en Alemania; High Fashion Society, donde ha llegado a vender su ropa Sienna Miller o Hardly Ever Worn It en la que han estado a la venta prendas “casi sin estrenar” de Kate Moss, resultan portales altamente fiables.
¿Cuál de todos?
Con la tienda escogida y localizada, el siguiente dilema lo plantea el diseño. Donde muchas sueñan con el 2.55 de Chanel, otras juran sobre el mencionado Birkin o Kelly de Hermès mientras unas pocas se desmarcan y fantasean con alguna de las piezas del Céline de Phoebe Philo. Y más ahora que la diseñadora será sustituida por Hedi Slimane al frente de la dirección creativa de la firma, se puede esperar que sus icónicos Trapèze o Luggage se revaloricen al alza. El Neverfull de Vuiton, la baguette de Fendi o Antígona de Givenchy completan la lista de valores seguros junto con Lady Dior, que es prácticamente el único de la maison que no se ha abaratado con los años como les ha ocurrido al Saddle o al Gaucho de la era Galliano.
En definitiva, si además de tus preferencias vas a guiarte por los números, ten muy presente que tanto con un Vuitton como con un Chanel se estima que, el día que decidieras venderlo, recuperarías un 85% de la inversión ¡cómo mínimo!
Cómo reconocer imitaciones
Hasta los profesionales tienen problemas para reconocer algunas falsificaciones si bien en gran parte de los casos las diferencias son evidentes.
1. Resulta muy recomendable pasarse primero por una tienda para tener entre tus manos un original, palpar el material y sostener el peso. No tengas reparos en preguntar abiertamente por los detalles y señales de autenticidad. Por ejemplo, dónde está ubicado el sello en ese modelo o si los remates tienen alguna particularidad. Así ocurre con el famoso guateado de Chanel que se compone de 10 a 12 puntadas por sección, por lo que si tiene más o menos estarías ante uno falso.
2. Siempre hay que solicitar el número de serie pero, cuidado, porque su ausencia no garantiza que se trate de una imitación. Si se trata de un modelo previo a la implantación del sistema o si el número se ha extraviado con el tiempo habrá que prestar especial atención al logo y sellos de la marca. Cuanto más cerca esté el sello de la costura mejor y fíjate bien en la fuente, la simetría de espacios y en que no haya ninguna inclinación.
3. Además, existen otras señales inequívocas. En el caso de la doble C metálica de Chanel, la derecha ha de pasar siempre sobre la izquierda. En un Hermès siempre hay dos logos visibles y ambos tienes que estar completamente legibles y sin signos evidentes de haber sido presionados sobre el cuero: uno en el centro de la cara frontal y otro en el reverso de uno de los extremos del cinturón. En este, una letra representa el año en que fue fabricado y dependiendo del período irá en un cuadrado, en un círculo o sin contornear (Q en el interior de un cuadrado equivale a 2013; en un círculo a 1987, sola a 1961) y el código del artesano que lo ha fabricado. Otra prueba infalible es que las costuras estén en línea recta, ya que, en uno real, las puntadas siempre son diagonales. Finalmente, un bolso de Louis Vuitton previo a 1980 no llevará código pero si es posterior, infórmate antes y fíjate bien en que la letra que figura en la serie se corresponda con el país que indica la etiqueta Made in France, USA, Spain... Y por último, en el logo, el principio de la P y el final de la S de la palabra Paris han de estar perfectamente alineados con el centro de la S de Louis y el de la primera T de Vuitton.
¿Te lo puedes permitir?
El precio medio de un bolso de Chanel vintage son 3350 euros así que si en los próximos 3 años, ahorras el dinero equivalente al café que tomas fuera cada mañana sustituyéndolo, simplemente, por uno que haces en casa o guardando una cantidad de dinero equivalente en una hucha, habrás ahorrado lo suficiente para invertir en algo más valioso que el oro. Es más, en otros 3 años, ese mismo bolso podría haber incrementado significativamente el precio por el que lo compraste. ¿Salen ahora las cuentas?