Los plumíferos se han convertido en uno de los abrigos más buscados este invierno. Hace poco vimos a Gigi Hadid luciendo un diseño de la firma escandinava Christina Ledang y, aunque el suyo era largo y rosa, estos abrigos se han convertido en la obsesión del street style. Algo parecido sucedió con los Teddy Bear, esas prendas de tejidos suaves y de color camel -al menos en sus inicios- con el que Caroline Daur, Annette Weber o Carine Roitfeld llenaron sus cuentas de Instagram. Aunque este tipo de prendas suelen tener un precio elevado, invertir en un buen abrigo es una de las primeras reglas para conseguir un armario en condiciones y practicar eso que muchos expertos denominan compra inteligente. Si lo piensas se va a convertir en la prenda que más vas a utilizar en invierno y, como ya ha demostrado Chiara Ferragni, el modelo adecuado es polivalente y capaz de hacer magia con los estilismos. La influencer demuestra cómo con dos buenos abrigos podrás reciclar mucho mejor tu fondo de armario o repetir el mismo look (día y noche) sin que se note.
© chiaraferragniSucedió en París. Llevaba un vestido negro de cuello vuelto que combinó con medias de lunares de Calzedonia y un sencillo abrigo negro. Ese mismo look, aunque con un diseño vintage de Roberto Cavalli, que se exhibirá en la exposición La Moda Italiana comisariada por Stefano Tonchi, fue la elección sofisticada de la influencer para protegerse del frío. Y, aunque acceder a un diseño de ese calibre es, como poco, complicado, existen un sinfín de opciones para elegir una prenda elegante y ecléctica que te saque de apuros. Eso sí, lo mejor es que tengas en cuenta algunos consejos antes de hacerte con ella.
1. Elige un tono neutro
Si vas a invertir una suma más o menos elevada de dinero en un abrigo, lo mejor es que optes por prendas de colores neutros. El negro, el beige, el camel o el gris son colores fáciles de combinar, sufridos y de los que no te cansarás demasiado rápido. Piensa que un tono de tendencia como el ultra violet, aunque llamativo, es complicado de combinar y no aguanta todo lo bien que debería el paso del tiempo.
2. Presta atención a los materiales
¿Buscas una prenda de entre tiempo o de invierno? Si tu respuesta es la segunda y vives en una zona en la que las temperaturas suelen ser bastante bajas, lo mejor es que descartes los abrigos de paño y apuestes por uno de pelo sintético, mucho más calentito. Aunque los plumíferos también son buenos aliados para el frío, es posible que no combinen tanto como te gustaría con prendas más sofisticadas o vestidos de fiesta.
3. Busca buenas calidades
Elegir un diseño de calidad no es tan caro como puede parecer si sabes dónde encontrarlo. Lo ideas es que hagas búsquedas exhaustivas durante la época de rebajas y compares los precios de los diferentes e-commerce de lujo digitales. Encontrarás prendas a precios razonables y que terminarás amortizando porque un buen abrigo puede durar muchos años. Puedes ir revisando también tus firmas favoritas cada cierto tiempo, muchas suelen tener descuentos puntuales.
4. Piensa si puede combinar con todo
La prueba final para saber si esa prenda es tan polivalente como esperas es que pienses mentalmente en llevarla con tres estilismos muy diferentes. Imagínala con vaqueros y un par de deportivas. ¿Funciona? Entonces piensa cómo quedaría con un vestido o una falda larga y botas. Si la respuesta es “de maravilla”, llega la última pregunta. ¿Qué tal con un look de fiesta? Si lo ves, entonces cómpralo.
Si tu abrigo reúne estas condiciones te sucederá igual que a Chiara, tendrás una pieza que hará que tus estilismos, aunque iguales, parezcan totalmente distintos. Logrando cambios tan radicales que equivaldrá a tener en el armario hasta seis prendas diferentes.
