Nacieron entre 1995 y 2010, se comunican con imágenes, crean sus propios contenidos para compartir en redes sociales, pasan más de tres horas navegando por internet y son altamente creativos. Así describen los expertos a la generación Z, un grupo que condensa al 25,9% de la población mundial y da el relevo a los millennials. Por eso no es de extrañar que Instagram se haya convertido en el escaparate del nuevo manifiesto de la moda. Una oleada de tendencias que llegan para quedarse.
© NapapijriEl adjetivo que mejor podría definir el estilo de la generación Z es ecléctico. Siguen una moda que trata de aunar variedad de pensamientos e ideas, que mira hacia el pasado sin perder de vista el futuro, que busca expresar sus propias ideas (quizá de una manera más clara que las generaciones anteriores) y de la que Kaia Gerber se ha convertido en su musa. Por eso, si cuando has leído el titular no sabías exactamente qué era un abrigo cagoule -a medio camino entre chubasquero y sudadera-, o no te habías dado cuenta de que esta prenda, que en realidad lleva décadas en el mercado, es porque no le has prestado la atención que merece.
© CarharttEl abrigo que representa sus valores
Aunque hay varios diseños similares (Asos o Carhartt cuentan con varios modelos), el que lucen las influencers de la generación Z pertenece a Napapijri, una firma italiana fundada 1987 en Acosta, a los pies del mont Blanc. De ahí la estética alpina de todas sus prendas y del modelo Rainforest Winter, el que se ha viralizado. Un abrigo que cuesta 179 euros y está disponible en 10 colores. La calidad de los materiales con los que trabaja la firma la ha posicionado como una de las mejor valoradas del mercado. También por su compromiso de convertirse en una firma sostenible. Dos valores (calidad y cuidado del medio ambiente y del entorno que los rodea) que esta generación busca en sus compras.
Estética deportiva, su nuevo objeto de deseo
Una de las principales características de esta generación es que busca, aunque sea de manera un poco inconsciente, un rupturismo con los millennials. Si los nacidos antes de 1995 han empezado a preocuparse, en los últimos años, por su salud introduciendo el deporte en su vida y adoptando una alimentación sana, la generación Z ha parecido tenerlo más claro desde el principio. Una preocupación que se refleja en su modo de vestir, casi siempre con zapatillas y prendas de origen deportivo, como las zapatillas o el abrigo canguro.
Mente abierta y estética sin género
Otra de las características que se le atribuyen a esta generación es que tiene menos prejuicios que los millennials y encuentran en temas como el género o el diseño de prendas aptas para el armario femenino y masculino un debate ya superado. Aunque el modelo de este abrigo sigue diferenciando en su web entre modelos femeninos y masculinos, su estética ungendered le ha valido más de 143.000 imágenes en Instagram.
