Cómo cuidar tus prendas de cachemir y que duren más tiempo
Con estos sencillos consejos lograrás conservarlas con éxito cada temporada
Seguro que en tu armario tienes varios jerséis de cachemir que no quieres usar demasiado por miedo a estropearlos durante el lavado. ¡Qué no te asuste enfrentarte a la lavadora! Entre nuestros consejos de moda más útiles hemos querido darle protagonismo a este cálido tejido que se convierte cada invierno en tendencia de la temporada. Basta con seguir unos sencillos pasos para evitar que tus prenda favoritas encojan o se deterioren.
Agua fría y nada de suavizante
Buenas noticias, al cachemir le gusta el agua, así que no tengas miedo de usar ese bonito jersey que te regalaron tus amigas. Lo recomendable, según los expertos, es lavarlo cada 2 o 3 veces que lo uses y siempre con agua fría (no superes nunca los 20 ºC). Asimismo, al tratarse de un tejido tan suave y delicado evita añadir suavizantes. Pese a lo que pueda parecer, no volverán tu cachemir más amoroso, al revés, terminarán alterando sus fibras y estropeándolo. Basta con usar un poco de detergente especial para lana.
A mano o a máquina
Contrariamente a lo que muchas madres piensan, es mejor lavar el cachemir en la lavadora. ¿El motivo? Sus movimientos regulares y constantes respetan la estructura de las fibras. Eso sí, usa preferiblemente una rejilla para que no se dañe durante las diferentes fases del lavado. En cuanto al programa, es aconsejable elegir los que van de 400 a 600 revoluciones.
Si aun así, prefieres hacerlo a mano, usa un barreño con agua templada y disuelve en él el producto. Durante el lavado, haz suaves movimientos, como si trabajaras una masa. Para escurrir bien el jersey, ayúdate de una toalla. Coloca la prenda sobre ella y haz ligeras presiones para que suelte todo el exceso de agua.
¿Y después del lavado?
Cuando la prenda esté ya limpia, colócala sobre una superficie lisa (un tendedero, por ejemplo) y estirada para que termine de secarse. Evita colgarla para que no se deforme con su propio peso. No pongas nunca el cachemir cerca de una fuente de calor: ni radiador, ni rayos de sol directos. Cuando planches la prenda, siempre es necesario, hazlo del revés, con la plancha suave y con un paño húmedo entre las dos para conservar su pomposidad. Por último, y si no quieres estropear tu jersey en el último paso, no planches cuello, cintura o puños, podría dañar su elasticidad.