Con un sutil recuerdo a la estética grunge pero con grandes dosis de sofisticación y elegancia. Cate Blanchett nos ha mostrado su lado más cañero en su última cita con la red carpet, la entrega de los Premios Tony. Una fiesta con el mundo del teatro que nos ha mostrado la parte más dark de la actriz dejando de lado su cara más romántica. Una estética que la ha coronado como nuestra favorita de esta cita con Broadway.
Louis Vuitton firmaba esta espectacular pieza repleta de detalles. Un diseño con paneles texturizados y supersposiciones en piel y paillettes que combinó con unos clásicos salones en negro. En cuanto al beauty look, la actriz jugó con el rollo grunge chic de su vestido e inspiró su make-up en la estética dark. Un concepto al que Cate no nos tiene acostumbrados pero que nos ha conquistado al mostrar su lado de femme fatale.
Una nueva Cate que compartió alfombra roja con otras 'celebs' que también brillaron con luz propia. Michelle Williams, que reapareció con una sencilla pieza también de Louis Vuitton -un dress code con el que volvió a potenciar ese parecido que la actriz tiene con Marilyn Monroe-; Lupita Nyong'o, con un aire muy romántico y delicado gracias a un vestido off the shoulder con estampado de flores de Hugo Boss; Karolina Kurkova con un look de aire rock de Coach; Joan Smalls lució una pieza joya de aire étnico de Altuzarra; Jourdan Dunn, toda una princesa de cuento con una pieza asimétrica de escote corazón y una gran cola, que firmaba Zac Posen; y Jenna Ushkowitz sorprendió con un vestido de cuello halter, cut-outs y aberturas de J.Mendel.