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Este 2020 ha traido consigo numerosos cambios, entre ellos el auge de plataformas tecnológicas que nos han facilitado la vida durante el confinamiento, desde apps de videollamadas hasta otras de puro entretenimiento, como es el caso de TikTok. Es cierto que esta última lleva cerca de tres años funcionando, pero la realidad es que su crecimiento ha sido exponencial y los últimos meses han supuesto un auténtico bombazo en todo el mundo, hasta el punto de que se ha creado nuevos perfiles de influencers digitales: las tiktokers. Numerosas famosas que ya triunfaban en Instagram han probado suerte con más o menos suerte en esta red social, incluidas las Kardashian o Jennifer Lopez, pero ninguna de ellas ha conseguido alcanzar el éxito de Charli D'Amelio, una adolescente estadounidense conocida a nivel internacional por sus bailes virales.
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Récord absoluto
A pesar de que, como toda influencer que se precie, no está exenta de polémica (a principios de esta semana llegó a perder cerca de un millón de seguidores por la mala educación con la que trató a un camarero), esta joven nacida en Conneticut está 'rompiendo' internet a unos niveles nunca vistos. Comenzó a compartir vídeos de sus bailes en Tik Tok en julio de 2019 y desde entonces ha provocado una auténtica revolución en esta red.
Hoy, apenas 16 meses después, puede presumir de ser la primera persona del mundo en alcanzar los 100 millones de seguidores, superando a cualquier celebrity, modelo y futbolista que te imagines, desde Jennifer Lopez -a quien, por cierto, ha retado con sus coreografías- hasta las Kardashian o la mismísima Ariana Grande. Para poner estos datos en perspectiva, la cantante atesora 207 millones en Instagram, contando con el perfil más popular de la plataforma, mientras que en Tik Tok apenas supera los 20.
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Ascenso meteórico
Pero, ¿qué tiene realmente Charli para haber logrado pasar por la derecha a las que hasta ahora eran las reinas de internet, las Kardashian? Lo cierto es que se trata de un fenómeno prácticamente inexplicable que numerosos expertos en la materia continúan intentando descifrar. Posiblemente es un cóctel entre haber estado en el momento adecuado, contar con una gran destreza a nivel digital, derrochar simpatía, bailar como una auténtica experta y saber sumarse a las tendencias virales antes que nadie, o incluso ser capaz de crearlas intuyendo qué le gusta ver a la gente.
Empezó compartiendo vídeos de coreografías caracterizados por su naturalidad, una virtud que hoy en día triunfa especialmente en internet, y ahora los combina con retos, humor, moda y belleza. Pero este éxito no se limita al entorno digital, sino que ha colaborado con marcas como Hollister, ha aparecido en un anuncio de la SuperBowl y tiene incluso una bebida en la cadena Dunkin Donuts con su nombre.
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Cosas de hermanas
Al igual que ocurre con otras influencers como es el caso de las españolas María Pombo, Marta Lozano o Grace Villareal, el éxito de Charli provocó que su hermana también saltara a la fama, puesto que empezó a salir en algunos de sus vídeos y ha acabado atesorando una auténtica legión de fans. Con sus 44 millones y medio de seguidores, Dixie también supera a las celebrities mencionadas anteriormente, y ha provado suerte en la industria de la música con su single Be Happy. Juntas han creado una línea de maquillaje que, a juzgar por las asombrosas cifras de estas adolescentes, deberían hacer temblar a las Kardashian, puesto que este nivel de éxito en tan poco tiempo es totalmente inédito y no tiene ninguna pinta de que vaya a frenarse próximamente, sino todo lo contrario.